El jamas pensaría que todo eso hubiese pasado... Daniela despertó el comienzo de todos esos momentos, pensar que conocer a Laura podría llegar a remover una lealtad tan grande.
Todo cambió gracias a Daniela, pero cómo es que Laura podría influir tanto en lo que el sentía. En realidad unos pies perfectos pueden cambiar la lealtad. Eso le pareció.
Eric llega a su casa después de estar años como esclavo de varias chicas. Es libre, pero no es lo que realmente quería. ¿Cómo se supone que continuaría sin tener a su Diosa Daniela? Ya no tenía razón de vivir, aunque culpándose por sentirse más atraído por los pies de Laura tenía una esperanza; volver a ver a Laura. Después de todo ya no tiene Diosa, tampoco amas, ni princesas. Se encontraba solo, con esperanza de que Laura se convirtiera en su Diosa. Le remordía la culpa de haber cambiado de lealtad. Aunque al parecer a Daniela no le interesó en lo minimo que Eric le fuera infiel. A fin de cuentas ella fue quien lo dejó estar con Laura.