Capítulo 31: Bendito

1.8K 151 1
                                    


Bendito.

Esa fue la primera palabra que se vino a la mente de Alexa. Besar a aquel hombre era una completa bendición.

Pequeños estremecimientos recorrían su cuerpo, por cada lugar que él tocaba y acariciaba mientras sus labios seguían unidos.

El terror había sido sustituido por ardor, un ardor que le recorría completamente todo el cuerpo, comenzando por los labios...donde los cálidos y dulces labios de él hacían contacto, uno bastante embriagante, con los de ella.

Apenas fue consciente de que él la envolvía con sus brazos y la acercaba a su cuerpo, solo podía sentir la magia de aquel beso envolviéndola por completo.

Era como si todo su raciocinio se hubiera muerto junto con la víbora, y en lo único que podía pensar era en él, su boca acariciándola y su cuerpo duro e inflexible, apretándose contra ella. Un pequeño gemido escapo de su garganta cuando él apreso uno de sus labios entre los dientes y le dio un pequeño tirón.

Varios besos y jadeos después, él levanto la cabeza y Alexa prácticamente olvido como seguir respirando, sus ojos se habían oscurecido pasando de un brillante verde esmeralda a un verde más intenso, más sombrío.

-no vuelvas a salir sola – susurró él, aún sin apartarse ni un centímetro de ella. Sus bocas rosándose y respiraciones mezclándose.

Ella asintió quedamente, aún completamente hipnotizada por sus ojos.

Soltando un tenue suspiro, Hardy trato de contenerse, estaba a un movimiento de tumbarla sobre la arena, levantarle las faldas y...

¡Maldición! No, debía contenerse.

No era posible que aquel beso, eh...simple beso, lograra descontrolarlo de esa manera., esa niñita logaba que sus defensas se vinieran abajo con mucha facilidad...demasiada facilidad.

Su corazón prácticamente se había detenido aterrado cuando vio a aquella peligrosa víbora alzándose contra la joven. Por nada del mundo deseaba volver a sentir aquello; sentirse aterrado con la sola posibilidad de verla en peligro. Por lo cual quedaban dos opciones; la primera, alejarse de la princesa y mantener sus sentimientos al margen. Y la segunda, vigilara y mantenerse junto a ella todo el tiempo que le fuera posible.

Sí, definitivamente la segunda era la opción que elegiría. De solo pensar en alejarse de ella, escalofríos recorrían su piel y una presión se instalaba en su corazón.

Cuando Hardy volvió a juntar sus labios con los de ella, esta vez solo rosándolos suavemente, oyó el sonido de voces acercándose...seguramente habian oído el grito de la chica.

Claramente Luca era uno de lo que se acercaba, Hardy podía reconocer sus gritos a kilómetros de distancia.

A regañadientes se separó y llevándola consigo, se puso de pie. Al hacerlo, ella se tambaleo y se afirmó de su camisa para mantenerse en pie, seguramente aún estaba en shock. Estar a segundo de ser atacada por una víbora venenosa no era algo que sucedía todos los días, menos a una princesa acostumbrada a vivir protegida.

-¿Qué sucedió, capitán? – Thompson llegó junto a ellos, bastante agitado y con la preocupación brillando en sus ojos.

A su amigo lo seguían Lucia, Ashton y la princesa de cabello rubio.

Cuando Alexa vio a su amiga, rápidamente se deshizo del agarre del capitán y corrió hacia ella.

Everything Has Changed  [H.S] //EDITANDO//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora