Un suceso inesperado

1.La mejor tarde

Marinette

"A continuación diré las parejas que he formado para hacer el trabajo." Mientras la profesora iba diciendo nombres yo rezaba para que me tocara con Adrien. Oh Adrien, era tan genial, amable, simpático, bondadoso... Realmente esperaba que me tocara con el. De solo imaginarlo mis mejillas ardían y sentía un millar de mariposas volar.

"Alya con Juleka, Nino con Rose y Adrien con Marinette" En ese momento estaba tan embobada pensado en Adrien que tarde un poco en reaccionar ante lo que la profe acababa de decir, pero cuando me di cuenta de lo que había dicho note como mis latidos se aceleraban. En ese momento rece para que nadie mas los notara, pero a mi amiga Alya no se le escapaba una y cuando vio mi sonrojo me dio un pequeño golpe con el codo mientras me guiñaba un ojo deseándome buena suerte. Le sonreí nerviosa y asentí intentando calmarme y mentalizándome para intentar dar lo mejor de mi.

Tarde un poco en salir ya que estaba descargando todo mi nerviosismo con mi mejor amiga, pues no quería que cuando viera al chico que amo me pusiera otra vez tan nerviosa que ni pudiera hablar. Al salir me encontré a Adrien apoyado en la pared revisando su móvil, tímidamente me acerqué a el y toque su hombro para llamar su atención. Entonces me miro y sonrió suavemente guardando su móvil en el bolsillo mientras me preguntaba si podíamos ir a mi casa ha hacer el trabajo, a lo que yo sin duda alguna respondí que si frenéticamente con la cabeza por los nervios.

Al entrar a casa salude a mis padres con un pequeño beso en la mejilla y les sonreí presentando a Adrien e indicando que iríamos a mi habitación hacer un trabajo. Mi madre, que siempre notaba todo lo que sentía, me sonrió coqueta y me guiño un ojo, a lo que solo pude sonrojarme y asentir para después conducirá a mi amado hasta mi habitación. Una vez llegamos me acorde de mis modales y golpe mi cabeza con la palma de la mano. "¿Quieres unas galletas, Adrien? ¿O algo de tomar?" le pregunte nerviosa y un poco avergonzada "Si, por favor Marinette" me respondió con una sonrisa. En ese momento estaba en las nubes, baje corriendo las escaleras, por lo que le tropecé varias veces, aunque ni me rompí la cabeza y eso era una buena señal de cómo empezar la tarde. A la subida también andaba despistada, tanto que cuando abrí la puerta y vi el rostro de Adrien me tope con el mismo y me tubo que aguantar de forma un poco vergonzosa para que no me cayera. Me quede unos segundo apoyada en Adrien mirándolo hasta que reaccione y me aparte sonrojada.

En ese momento oímos unas sirenas a través de la venta y cambiando mi actitud totalmente le dije de forma seria "Disculpa tengo que ir un momento a... regar las plantas, si me disculpas..." "Si claro, yo voy un momento al baño" me dijo. Por lo tanto los dos nos separamos, yo me dirigí al balcón y dije "¡Tikki, transfórmame!" Después de que el traje rojo con topos negros me envolviera salí volando con mi yo-yo dirección a el sitio donde se habían escuchado las sirenas.

Al cabo de unos segundos de llegar apareció Chat noir diciendo lo de siempre "Buenos días, My Lady" mientras hacia una mini reverencia y tomaba mi mano de forma coqueta. "Buenos días gatito" le dije mientras sonreía y me soltaba de se agarre. Lance mi yo-yo hacia el enemigo y así empezamos una de nuestras mucha peleas por defender La Paz.

Chat noir y yo luchamos contra el villano y ganamos, mire al anillo de Chat noir y vi que le quedaba poco tiempo así que antes de que me dijera algún halago le di un mini empujón indicándole que tenía que irse rápido y así nos despedimos, mientras el decía "Nos vemos, My Lady" yo sonreía con desespero pensando en ese compañero ten galán y coqueto que me había tocado.

Adrien

Me dirigí rápido a la casa de Marinette, nada mas entrar por la ventana del baño la transformación se acabo liberando a Plagg. "Debes de estar feliz de haber podido ver a tu Lady, ¿verdad?" Me dijo Plagg con una sonrisa picara. "Si..." Respondí suspirando mientras pensaba en mi adorada y hermosa y valiente y fantástica Ladybug.

Después de ese gran suspiro me acorde de Marinette y me dirigí  hacia su habitación rápidamente sin querer levantar sospechas. Cuando empecé ha abrir la puerta vi a mi amada Ladybug llegar al balcón y de repente transformarse en Marinette. Cerré la puerta con sumo sigilo para que Marinette no se diera cuenta de que yo estaba hay. Estaba totalmente sorprendido, la persona a la que amaba totalmente era también mi estimada compañera de clase. Me llame tonto a mi mismo por no haberla reconocido, pero después suspiré largamente y me paré a pensar Lo que acababa de descubrir había cambiado mi vida totalmente, y me preguntaba hasta donde me llevaría haber descubierto su gran secreto, pero por ahora debía disimular haciendo ver que no conocía su secreto.