s e s e n t a -y- u n o

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Finalmente atrapé a Mer del brazo. Estaba corriendo por el pasillo, intentando huir. Pero ya basta de esto. No quiero permanecer alejado más tiempo.

    — Espera.

  — Por favor aléjate — pidió ella en un murmullo, cerrando los ojos fuertemente.

— ¿Qué pasa? ¿Por qué siempre huyes cada vez que me ves? No lo entiendo. Por favor, dame una pista. ¿Qué es lo que te impide hablar conmigo? ¿Acercarte a mí?

Ella tiró un poco más. No la iba a dejar ir hasta que me diera una pista de lo que estaba mal. Hasta que dijo:

— Gemma.

Y mi agarre sobre su brazo se desvaneció por completo.  

La frase del díaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora