Las 50 Sombras En Akatsuki

Capítulo #2

Las 50 Sombras del Tacaño...
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Narra Hidan

Mis ojos estaban vendados y mis manos atadas, me encontraba solo con unos boxers a disposición de Kakuzu, maldito hijo de puta,ugh.
El dolor en mis brazos empieza a hacerse presente, siendo sincero, me agrada estar así pero como quiera Kakuzu es un maldito perro por tenerme así... Y más aún por dejarme sólo desde hace uno segundos. Suspiro molesto.

Paso un rato hasta que escuché la puerta. - Eres tú maldito tacaño?-. Escuché su maldita risa por lo bajo. -quién más? estúpido jashinista- . - Superman! -. -idiota...no estas en posición de estar haciendo bromas estúpidas - sentí un golpe, pero no era uno normal como todos los demás que me daba siempre, este me había quemado la espalda por lo cual solté un grito bastante alto .-AHHH!!! QUÉ DEMONIOS FUE ESO?!-. - Un látigo, vamos no me digas que tanto te dolió -.- C-claro que me dolió idiota...pero...- sentí otro latigazo. - AHH!- este dolor empezaba a gustarme, me dio varios latigazos pero me gustaba, me gustaba mucho, este estúpido viejo sabe como complacer a alguien como yo, con lo bestia que es después de todo...

-Sabes,Hidan?, me gusta verte así - sentí como se estaba acercando a mi y tiró de mi cabello sin llegar a ser muy rudo. - Te gusta lo que te hago? Este dolor que te estoy haciendo sentir ?- no sabía que contestar pero para qué mentir. - si... Y quiero más - en serio he dicho eso? ... Kakuzu soltó mi cabello y sentí como pasaba ese látigo por mi piel dañada, por mi cuerpo corría un escalofrío placentero cada vez que lo hacía....sé acercó a mí desatando los fuertes hilos que ataban mis manos. -Quitate los boxers -. -maldito viejo,no me des órdenes...Jashin te castigará y te mandará al infierno - a pesar de mis quejas le hice caso y me quité los boxers quedando completamente desnudo, no me importa estar desnudo realmente,pero sí que me mandara el muy puto este. -Quítame la venda esta de los ojos ya, maldito idiota - sentí otro latigazo pero esta vez en mi trasero y grité de nuevo por el dolor placentero que me estaba provocando -con ese vocabulario..hmm no lo creo,además el que da las órdenes soy yo- .

-maldito viejo...- dije con la respiración un poco agitada,-párate-ordenó nuevamente y lo hice. - muy bien - volvió a golpear mi trasero esta vez mucho más fuerte. -AHHH!! - grité y mordí mi labio, luego él se paró muy cerca de mi y me acorraló contra la pared, podía sentir su pelvis contra mi trasero. Cuando le iba a decir que no hiciera eso una de sus manos tomó mi miembro. - ahh...q-que.. haces? - mis mejillas empezaron a arder, oh por Jashin-sama... no es posible que me esté sonrojando... Bajé un poco la cabeza tratando de evitar que 'Kuzu percibiera eso. Su lengua recorrió brevemente un área de mi cuello -K-'kuzu...ngh- traté de contener mis gemidos pero no se me hacía muy fácil, maldito viejo como se atreve a hacerme sentir así. - Hidan...- susurró mi nombre al darme la vuelta y luego sentí sus labios sobre los míos moviéndose no pude evitar corresponderlo. El beso se fue haciendo más feroz haciendo que nuestra lenguas batallarán por tener el control de la otra...Kakuzu se separó de mi y me di cuenta que yo tenía los brazos alrededor de su cuello, en que momento lo hice?...

-'kuzu...qué..estas haciendo?- dije cuando me cargó haciendo que mis piernas rodearan su cintura por instinto. -'Kuzu...- me volvió a besar con la misma ferocidad de antes y cuando nos volvimos a separar me tenía acostado en algo suave ...que me imagino que es la cama - Hidan...voy a quitarte la venda - y así lo hizo me la quitó pero mis ojos tardaron un poco a acostumbrarse a la luz de nuevo, cuando lo hicieron lo ví encima de mi mirándome, su mirada,ahora, era tan diferente a las que me ha dado antes, que no sé descifrar su significado pero eso no importa tanto, lo miré, me sentía arder en ese momento, tenía una erección bastante adolorida que Kakuzu había dejado de atender hace rato y a la misma vez tenía un poco de miedo porque sabía que Kakuzu seguiría y en algún momento estaría dentro mío y ya no sería virgen, aunque el dolor no me importe aún así me da temor que Kakuzu sea muy rudo conmigo sin que yo se lo pida....-Tranquilízate Hidan... - volvió a besarme y luego besó mi cuello, también dándome pequeños mordiscos...

Su mano izquierda bajó a mi trasero y empezó a prepararme para lo final, me dolía bastante pero aún así me encontraba gimiendo, cuando mi trasero estuvo listo quitó su mano de ahí y la apoyó en la cama tomando la posición inicial, me besó otra vez pero con cariño, un beso muy diferente, - Estas listo? - me preguntó.. -h-hazlo y n-no jodas más - me miró con una pequeña sonrisa burlona al parecer por lo que dije y empezó a alinear su miembro y a entrar en mi lentamente. Su miembro entró completo con muchos quejidos y gemidos de mi parte pero lo hizo entonces no se movió hasta que me acostumbré y ahí empezó aquel vaivén que me resultaba bastante placentero podía sentir como tocaba ese lugar que me hacía gemir más alto en cada embestida -K-kuzu...Ah!!...m-más..ahh!- él empezó a embestir con más rapidez y fuerza ya no sentía dolor sólo mucho placer me estaba volviendo loco, quería más y mientras más pedía más Kakuzu me daba. Me besó y puse mi mano en su nuca profundizando el beso y acariciando sus cabellos. Después de un rato de embestidas salvajes y placenteras empecé a sentir algo como si me fuera venir y en ese momento Kakuzu entrelazó mi otra mano con la suya mientras me seguía besando pero no pasó mucho tiempo hasta que sentí algo caliente en mi interior y también entre nosotros, nos habíamos corrido a la misma vez ... Nos quedamos mirándonos tras deshacer el beso del cual había quedado un delgado hilo de saliva uniéndo nuestros labios ... Y después Kakuzu salió de mi interior, soltó mi mano y se recostó a mi lado ..-'Kuzu yo....-

-Si?-. me puse de lado para mirarlo. - mmm....mañana quiero que esto se repita...quiero que me des duro contra el muro, macizo contra el piso 7w7 -. - vaya...eso sería interesante...pero tengo dinero que contar, lo siento-. -Estupido!-..-ya, ya era mentira, Te amo, maldito Jashinista-. -Yo te odio, viejo tacaño - dije antes de besarlo, y finalmente separarnos y dejar que me abrazara, así quedándonos profundamente dormidos a causa del cansancio.

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Kakuhidan