La noche era fría pero nuestros cuerpos ardían como fuego, un fuego creciente en aquella oscura habitación iluminando todo a su paso,quemándonos...
Sus ojos azules entrecerrados, sus mejillas sonrojadas y sus labios rojos como las fresas con las que habíamos comenzado este encuentro hace un rato. Realmente era un desastre de él pero a la misma vez era tan hermoso, que aunque me cueste admitirlo no había obra de arte que se le comparase.
Besé sus labios dulces y luego bajé a atacar su cuello con pequeños besos y mordiscos que lo hacían gemir, bajé hasta sus pezones hasta dejarlos duros los dos, seguí explorando y besando su piel hasta llegar a su miembro que estaba erecto y lo metí a mi boca, mientras mi querido Deidara gemía fuertemente haciendo que mi erección aumentara, ya empezaba a doler bajo mi pantalón..
—Da-Danna..nhg..me...voy a..ngh- antes de que pudiera correrse saqué su miembro de mi boca y lo presione para evitar que se corriera por lo que me miró con cara de suplica. — aún no- sonrei con malicia y solté sus manos que estaban atadas a la cama.
Lo besé metiendo mi lengua en su boca haciendo, con la suya, un batalla en la que yo gané el control, por la falta de aire nos separamos y su mirada se unió con la mía haciendo que se sonrojase aún más por lo cual bajo su mirada siguiendo sus dedos bajar por mi pecho y siguió su recorrido hasta llegar al borde de mi pantalón y volvió a mirarme, sabía que esa mirada significaba que quería que me los quitara de una vez para darle duro por lo cual me los quité al igual que los boxers dejando libre mi gran y dolida erección
—Danna...por favor..,un- Dijo en un susurro seguro su erección también dolía así que dejé de hacerlo sufrir y me acomodé mejor entre sus piernas alineando mi miembro en su entrada y lo metí poco a poco aunque no se me hizo tan difícil ya que no hacia mucho rato desde que lo había preparado pero aún así le dolía .—ahh!...Dan-na- gimió cuando mi miembro estuvo completamente dentro de él. Esperé a que se acostumbrara un poco y luego empecé envestirlo fuertemente mientras el cada vez gemía más alto, se abrazó a mi cuello y lo besé ahogando sus gemidos en aquel beso lleno de pasión y aunque no lo quisiese también amor, sentí como arañaba mi espalda y mis embestidas eran cada vez más fuertes y rápidas nuestros cuerpos se convertían en uno sólo, se funcionaban en este acto hasta que los dos nos corrimos como en ese momento en que lo eterno se vuelve efímero y viceversa. Salí de Deidara y me acosté a su lado, estaba exhausto y él aún más
Me abrazó dándome un beso corto y tierno aún con la respiración agitada y el corazón a mil al igual que yo .— Te amo ...Sasori no Danna,un - susurró cansado antes de dormirse profundamente con su cabeza recostada en mi pecho . Sonreí,algo que no hacia mucho pero en este momento era inevitable y acaricié su cabello —y yo a ti...- dije casi inaudible pues sabía que ya estaba dormido, finalmente terminamos los dos dormidos bajo la luz de la luna que había sido testigo de nuestra obra de arte.
