A la mañana siguiente cuando despertó se sintió más tranquilo y relajado, como si todo hubiera sido un mal sueño. Se dio una ligera ducha y se cambió de ropa dirigiéndose a la cocina para desayunar.
Esa mañana no logro encontrar la taza azul.
-Solo fue un sueño-Susurro tomando unos tragos de leche del cartón.
Se colocó un abrigo color negro y una bufanda azul oscuro, esa mañana hacía mucho frío. Tomó las llaves de su auto, su mochila y se marchó a la universidad. Desde hace ya tres años vivía solo y estudiaba abogacía en una universidad privada.
Subió a su auto color negro y arrancó al campus. No pudo concentrarse en ninguna de sus clases, ese sueño había sido demasiado extraño.
Cuando al fin la hora de clases acabaron, decidió caminar por el campus algo desconcentrado, varias chicas voltearon a mirarlo mientras pasaba.
-¡Martijn!-Gritaron sus amigos.
Camino hasta una mesa de mármol en la cual se encontraban Robbert, Oliver y Daan.
-Has estado muy callado Garritsen, más de lo normal-Murmuró Robbert.
Martijn ni siquiera se molestó en contestar, solo se limitó a mandarle una mirada de advertencia a Robbert. Hoy no tenía ganas de nada. Su mente aún vagaba en el pasado y eso no le agradaba.
*Flash back*
-Hola, Martijn ¿Cómo te sientes?-Susurró la de cabellos castaños sentándose en la cama donde descansaba el pequeño niño-Julian me dijo que estabas enfermo.
-Me duele mucho-Lloriqueo mientras apretaba sus brazos a su estómago, la chica tocó su frente y notó que tenía algo de fiebre.
Los padres del niño habían salido y lo habían dejado al cuidado de su hermano mayor, Julian, otro niño que no pasaba de los once años. Había
sido él quien la llamó cerca de las diez de la noche cuando su pequeño hermano comenzó a sentirse mal.-Trae el termómetro Juls-Ordeno y Julian obedeció de inmediato.
-Tiene 38,5° de fiebre-Le dijo a Julian devolviéndole el termómetro.
-¿Comiste algo raro?-Martijn solo asintió con la cabeza-¿Qué?
-Todo lo de la heladera-Contestó Julian- Me dejaron cuidándolo, yo jamás pensé que se iba a engullir toda la heladera en quince minutos-Respondió defendiéndose ante la acusadora mirada de la de chica
-Bien, busca en el baño gotitas para el estómago, de niño-Le ordenó al hermano mayor.
Julian fue corriendo al baño y regreso con un pequeño frasco de gotas. Kassie le preparó las gotitas a Martijn en un vaso con agua y se lo dio a tomar.
-Anda Martijn, toma esto, te hará bien.
-Pero no quiero, eso sabe horrible- Mencionó con un puchero.
-Vamos, no seas infantil y tómatelo-Le dijo Julian.
-¡Julian!-Lo regañó la chica-Vamos amor, te sentirás mejor.
-Con una condición-Dijo y sus mejillas adquirieron un leve tono rosado- Un beso.
-Bien-Dijo Kassie con una sonrisa.
Martijn tomó el vaso entre sus pequeñas manitas y tomó todo el remedio, una vez se lo alcanzó a Kassie, esta se lo paso a Julian quien se encaminó a la salida del dormitorio.
-Descansa, bonito-Susurro besando su mejilla con cariño y ternura.
Él sonrió embobado por el beso y se acurrucó en la cama.
-No te vayas hasta que me duerma.
*Fin del flash back*
-Hola, Martijn-Lo saludo una voluptuosa chica haciendo que despertara de su ensoñación.
-Hola-Contestó secamente el chico.
La chica se sonrojó cuando él volteó a verla y se sentó a su lado.
-Ash, Lynn, ya ríndete-Se burló Daan logrando las risas de quienes los acompañaban en la mesa.
-¡Cállate!-Chilló la presidenta del club de fans de Martijn en su escuela.
-¿Quién es ella?-Murmuró embobado Robbert.
Martijn volteó el rostro a donde sus compañeros observaban y se topó con una bonita chica que caminaba hacía él con una sonrisa.-No-Susurro al verla acercarse.
Su rizado cabello se mecía mientras caminaba, no poseía ningún tipo de maquillaje pero sus mejillas tenían un ligero sonrojo y sus labios estaban tan rojos como las cerezas, llevaba el mismo vestido blanco que tenía anoche, una bufanda negra, unas botas color blanco y por encima cubriéndose del frío uno de sus abrigos, una chaqueta holgada de jean que tenia detalles en negro.
-Hola, Martijn.
-¿Quién es ella?-Bufo entre celosa y fastidiada Lynn observando a la chica hablarle con mucha confianza a su Martijn.
-Sí ¿Quién es ella?-La secundo Robbert mostrando interés en su tono de voz.
Kassie le sonrió incómoda por la forma como la veía, Martijn bufo por lo bajo levantándose de golpe de la mesa y llevándose consigo a la chica a rastras.-¿Qué rayos haces aquí?-Le exigió una vez se alejaron del grupo.
-No te enfades, Martijn-Susurro poniendo una de sus delicadas manos en la mejilla del chico.
Martijn se relajó con solo oír su voz, porque era su voz la recordaba todas las noches en el orfanato, cada noche al dormir en el cuarto que compartía con otros doce niños huérfanos, recordaba las canciones que ella le cantaba antes de dormir cuando hacía de su niñera y al morir sus padres hubiera querido que ella estuviera a su lado.
-Eres real-Murmuró atontado.
Kassie asintió con una sonrisa, lo tomó de la mano y volvió a la mesa con los amigos del chico.
-Hola, mi nombre es Kassie Garritsen-Se presentó.
Martijn la miró sorprendido a su lado.
-Soy la tía de Martijn-Agregó, Martijn rodó los ojos por la tonta mentira.
Ellos no podían creerse eso.-¿No eres muy joven?-Le preguntó Oliver.
-No, mamá y mi tía se embarazaron al mismo tiempo-Contó sentándose en la mesa, Martijn bufo por lo bajo sentado a su lado.
-Pues es un gusto conocerte-Dijo el castaño-Mi nombre es Daan Romers, un gusto-Se presentó enérgico.
Kassie sonrió pero inevitablemente sus ojos se desviaron a la pequeña chica, de aproximadamente 1.60, que se encontraba a su lado. En realidad de pequeña ya no tenía nada, tendría cerca de veintiún años, se veía más madura y bonita, pero conservaba su inocencia y ternura, su piel blanca, de cuerpo delgado, cabello largo y rubio, y bellos ojos color verdes que poseía. Sonrió al recordarla, quizás seguiría siendo amigable, algo tímida, inquieta, pero con su carácter algo fuerte y cuidadosa con las personas que amaba, lo cual era lo más probable; Raquel inevitablemente le devolvió el gesto, fue algo más instintivo que un simple gesto de cortesía.
Robbert frunció el ceño y solo se dedico a pensar. Los rasgos de esa chica eran muy particulares.
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Mi Ángel Guardián © | M.G
FanficOne Shot adaptado con Martin Garrix. Todos los derechos reservados a la autora original.