Capitulo 2

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-Tranquilo senpai comprendo lo que me dice pero no tiene que preocuparse ya que no llegare aún, recuerde que falta un mes para que termine todo acá y podré regresar a mi trabajo en Nagoya.-

Era verdad, aun faltaba más de un mes para que su ahora amante volviera. Así que esa reacción no fue miedo o confusión... tal vez fue el deseo de poder verlo pronto.

- Morinaga yo...- intento hablar senpai pero...

- No se preocupe senpai, justo hoy nos acaban de dar la noticia. El gerente nos ha informado que es un regalo por nuestro esfuerzo y dedicación pero más por retenernos tanto tiempo aquí. Así que nos está dando este tiempo para descansar. Lo mejor es que la farmacéutica cubrirá todos los gastos.- Decía emocionado el ojo verde.

A lo que el senpai respondió fingiendo el más mínimo interés.- Ah... es lo mínimo que pueden hacer! –

- Bueno senpai... yo no solo le hable para contarle esto...yo... - el peli azul comenzó a dudar, esa valentía se esfumaba. Pedirle o no pedirle una petición como esa... nada perdía. - Peores cosas ya hemos pasado.- Pensó.

-Bueno me gustaría saber si en este mes tú podrías... digo si tú quieres, si no por mi está bien...-

Ahora que pretende ¿Qué quiere? El senpai comenzaba a enojarse cuando decidió interrumpir... - Dilo-

Ante esto Morinaga tuvo que recuperar su valor y enfrentarse a su temible tirano.

Quería saber si... si a usted...- y con voz pequeñita continuo. -Le gustaría tomar unas vacaciones también, y salir en algún viaje. So...Sol...Solos tú y y...yo.- No supo cómo pero termino de hablar y sabía que decir o mejor dicho pedir aquello era de lo más atrevido para senpai. Pero eso no le asustaba no, su mayor temor era conocer la respuesta que recibiría por parte del platinado.

El sempai no podía creer lo que escucho. Y se quedo de piedra.

¿Vacaciones? Fue lo único que alcanzo a procesar.

-S...Si.- respondió Morinaga con voz pequeñita.

-Pero...tu sabes que yo... mi tiempo y mis experimentos... es imposible.-

-Sempai es por eso que yo quise hablar con usted ahora. ¡Por favor! A mí me encantaría pasar tiempo con usted-

Sempai trato de buscar pretextos pero...-Yo tendría que... Es mucho trabajo Morinaga. Mira, mejor lo hablamos cuando estés aquí.

-Pero senpai yo...- intento hablar el de el peli azul pero en su voz se podía notar que ya estaba comenzando a pensar lo peor y que aquello había sido una equivocación... una vez más presionaba a su sempai.

-Sí, ya sé lo que estas pensando.- Y en voz alta Souichi pensó... - a veces me pregunto de donde sacas tanto tiempo para trabajar y pensar en este tipo de cosas. -

Y como una suplica senpai escucho decir de su perrito faldero -Me jura que lo va a pensar... ¡¿Sempai?! Esa pequeña pregunta salió con atrevimiento de la voz nerviosa de Morinaga a lo que sempai con un ligero malestar en su ser solo podo decir...

-¡Si tarado! Lo voy a pensar.-

Con un brillo segador de amor el cual pudo imaginar el Tatsumi en toda la cara de idiota de su amante este le agradecía... - Senpai ¡Gracias! ¡Gracias! -

Como si fuera aquella primera vez 2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora