Sus labios se despegaron, con una mirada maciza por parte de cada uno.
Vanesa: "¿Me- me acabas de besar?"
Abraham: "Pues claro. ¿No lo has sentido?
Vanesa: "Hombre. Claro que lo he sentido, pero... ¿Esto qué significa?"
Abraham: "¿Tú que crees, cariño?"
Los ojos de nuestra protagonista se volvieron fijos en un punto y Abraham, preocupado, miró hacia aquel extraño punto para sentir la misma sensación de su futura chica...
Abraham: "¿Estás bien?"
Vanesa: " Besame y dime que no estoy soñando..." Replicó ella con aún la mirada fija de sorpresa.
Él la besó, agarró sus mejillas y la miró fijamente. "No estás soñando, boba." Añadió él.
"Pellizcame..." susurró. Él mordió sus labios hasta un punto que pudo hacer daño. "Vale... No lo estoy..." añadió ella entre risas. Abraham se sentó en la cama del dormitorio de nuestra protagonista con todo el cariño del mundo y cerró los ojos un momento, pensativo, con la mirada hacia el techo.
Abraham: "¿Te apetece venirte a mi casa a dormir esta noche?"
Vanesa: "¿Yo? Esta noche... ¿EN TU CASA?"
Abraham: "Si. ¿Te apetece?"
Los pensamientos de nuestra chica se desbordaron y no pudo negarlo. Quiso aprovechar ese momento para poder disfrutar con su ídolo y poder saber mucho mas de él, y que él la conociera mucho más...
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Sin Fronteras...
RomanceVanesa es una chica de 17 años luchadora, amante de la música y con un enorme idolo. El gran idolo pop juvenil Abraham. Está enamorada, y nunca ha podido conocer al chico de sus sueños, pero gracias a sus padres uno de sus mayores sueños se cumplirá...
