five.

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Aún recuerdo perfectamente cuando te conocí.

Día 10
Mes Agosto
Año 2012

Yo tenía 13 años y tu 14. Era el inicio del segundo año de la escuela secundaria. Estábamos a punto de cumplir años. Siempre recordaré la primera vez que te vi. Nos mirabas a todos como analizando quién era quien o quién hiba a ser quien.
Faltaba exactamente un mes para tu cumpleaños y un mes y una semana para el mío.
Para ser totalmente sincera me apareciste muy común cuando te vi, estatura media, ojos grandes y cafés, cabello castaño oscuro corto. Estabas usando una playera blanca siempre sin ningún estampado, pantalones de mezclilla azul y Converse blancos de tela con una estrella azul a los lados.
No se como capturé tantos detalles tuyos si me pareciste tan normal. Supongo que sabía que un día te podría ver más de cerca y conocer el tic nervioso que tienes en el cuello, el lunar bajo tu clavícula y la pequeña cicatriz en tu codo. No sabía que llegaría a conocer la historia de porque llegaste a esa escuela, porque no estabas en otra, quienes eran tu hermanos, de donde venías y a dónde querías ir. Llegué a saber que generalmente te gusta tener el control y que tu hermana era prácticamente tu mejor amiga. Me contaste porque tu papá viajaba tanto y porque tu mamá trabajaba mucho. No sabíamos muchas cosas, unas más incongruentes que otras, como por ejemplo que ibas a pelearte con la mitad de la escuela por no sabes cuando callarte; o que la chica que estaba sentada tres filas hacia la derecha que tu terminaría como tu cuñada. Todo fue muy raro.
Cambiaste muchas cosas, y no sólo en mi. Y se que yo también cambie algunas cosas en ti.
Nos volvimos tan cercanas que me contaste las historia de tu cicatriz y yo te conté la historia de mi mamá.
Fuimos tan cercanas que llegué a saber porqué crees en Dios.

Me gusta pensar que las cosas aún están en el lugar de siempre. Que nada cambió.

Me cambiaste.

-O.

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