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La noticia había sido propuesta un viernes a la mañana y Alice no tomaba su decisión. Sería difícil elegir, no podía negarse a semejante invitación.

No le contaría nada a nadie, hasta que estuviera decidida.

...

Era sábado y el calor hacia que las mantas se pegaran al cuerpo, el ventilador no funcionaba otra vez y se despertó con un grito de África.

- ¡Lo hice! - gritaba.

Entonces entro a la pieza de Alice y se tiro encima de su hermana.

- Despierta tonta ¡Aprobé!- estaba llorando de la emoción, pero Alice tenía sus neuronas apagadas.

- ¡Dormilona! ¿No me escuchas? ¡A-P-R-O-B-É!

En un segundo ya estaba en el suelo, Alice la había tirado al piso para gritar de felicidad.

- ¡Lo has hecho! ¡Mi hermana es historiadora! - Empezó a llorar de la felicidad y la abrazo con fuerza. - ¡Eres una genio!

La razón por tanta felicidad era que África era la primera mujer de la familia que estudiaba y se recibía en una universidad.

El resto del fin de semana festejaron, por suerte había dos feriados, comieron torta y pizza dos noches seguidas, miraron las estrellas y acamparon llenas de felicidad, sin darse cuenta de lo que significaba que África aprobara.

Ella se iría de Calep y lo haría con o sin Alice. Estaba todo preparado, África solo necesitaba una decisión y era la de su hermana.

...

Miércoles luego de un súper fin de semana.

Era difícil levantarse y Alice solo quería seguir durmiendo, tenía los ojos totalmente pegados y su alarma no quería apagarse.

- Vamos cariño, hay que ir a la escuela. - Le dijo su madre levantándola despacio. - Tengo que tender tu cama.

Que África fuera la primera mujer universitaria de la familia, era tal vez porque siempre las madres se habían dedicado la mayor parte del tiempo a la casa. La comida, las camas, limpieza, algo que Alice no haría ni en un futuro lejano.

- Solo cinco minutos. - murmuro Alice durmiéndose de vuelta.

...

Maldita sea, había llegado tarde y la profesora no la perdonó.

- ¡Alice! ¿No te había dado ya una oportunidad?

Consecuencia de cinco... media hora dormida habían sido pagados con una evaluación oral.

Desastrosa, pero al terminar la profesora se olvido de su llegada tarde.

Alice ya deseaba irse de esa escuela, todos los días había materias diferentes, nunca sabias quien te tocaba y eso era muy molesto.

- ¿Estás bien? - Le pregunto América, mientras le daba una galleta al terminar la clase.

- No lo sé.

Ese recreo les explico a sus amigas lo que había pasado con Daniel y las tres estaban emocionadas por el beso, pero enojadas porque Alice era una bipolar y tenían razón.

- No sé cómo explicarlo. Realmente me gusta, fantaseaba con él y es perfecto, pero siento que no es lo correcto.

- Tal vez no quieres aceptar que por una vez la realidad es hermosa. - Le dijo América con mirada triste. - Estas tan acostumbrada a que la realidad sea una mierda, que cuando te pasa algo lindo no lo aceptas por miedo a que te dañe.

Tormentas iluminadas//TERMINADA #Wattys2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora