agressive | l.s

Tres.

Al otro día, Harry ni si quiera lo miro. Nada. Ni una sola mirada.

Tenía un hematoma en el ojo, en el estómago también, con algunos rasguños. Pero Louis, no sabia nada de estas marcas.

Ambos estaban sentados en el sofá. El mayor en una esquina y el rizado del otro. Para Louis, era un silencio incómodo. Para Harry, uno cómodo. Tenía la mirada en un punto fijo.

—¿Estarás así todo el día? Por Dios, ni que los golpes fueron tan fuerte. Lo que tienes en el ojo, sólo es un pequeño rasguño.-Dijo Louis, tan tranquilo. Como si nada hubiese sucedido.

Harry apretó sus manos con furia. Pero, respondió pacifico. 

—"Pequeño rasguño"-Repitió haciendo seña con sus manos.-¿Quieres ver también mi otros "pequeños rasguños" en mi estómago? -Se levantó rápidamente y levantó su camiseta, dejando ver todos lo golpes.

El castaño sintió un frío recorrer su cuerpo y quedó en shock unos segundos. Su compañero se volvió a colocar su camiseta en donde estaba antes y se sentó en el mismo lugar, cruzando sus brazos.

(...)

Habían discutido muchas veces más. Hasta que Louis se cansó, tomo un abrigo y se fue sin dar explicación. A todo esto ya eran las diez de la noche, así que Harry sabía a donde iba. A su viejo amigo, un bar.

Siempre, cuándo Louis se iba a beber por ahí luego llamaba a su novio para que vaya a recogerlo y llevarlo a su casa. Pero esa noche no pasó lo mismo.

El rizado estaba en su habitación muy preocupado por él. Sí, quizá lo golpeo. Si, quizás lo humilla frente a todo el mundo sin importarle nada, pero aún era su novio.

Miraba todo el tiempo el celular. Ni un mensaje, una llamada. No había rastro de Louis. Hasta que escuchó el ruido de la puerta. Sonrió. 

Salió corriendo hacia abajo, con su sonrisa en el rostro.

—¡Lou-Se interrumpió cuando vio a su novio besándose con otro muchacho, delante de él.

—Oh Dios mío...-susurró.