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-Bueno manos a la obra.- me digo a mi mismo... y bueno, nadie me escucha.

Camino hacia la casa, subo las pequeñas escaleras de maderas, las cuales estaban muy descuidadas y con problemas de humedad, y quedo en frente a la puerta de la casa, no se que hacer, trato de agarrar el picaporte pero mi mano traspasa la puerta, inmediatamente trato de meter todo el brazo, luego la cabeza y después meto todo el cuerpo. Cuando entro puedo observar donde vendría a ser el living de la casa, las paredes están pintadas de blanco, con hoyos y manchas de humedad, hay una pequeña tele, delante de la tele un sillón rojo, viejo con algunos hoyos, y sobre él un señor con una botella de ¿Vino? no distingo lo que es, dormido. Al lado derecho del sillón donde esta el señor , hay un sofá, también muy viejo, del color anteriormente mencionado. Doy unos pasos más y me encuentro a mi lado izquierdo una puerta abierta, doy un corto vistazo y es la cocina, con una mesa chica y 3 sillas, y heladera, cocina, un lava platos, etc, al frente encuentro una escalera, con unos cuantos escalones rotos. Subo los escalones, estos hacen un chillido. Llego hasta el final de la escalera y me encuentro con un pequeño pasillo, a mi izquierda, en donde termina un pasillo hay una puerta con mucho stikers pegados y una placa en el medio que dice ''Elissa'', ahí esta mi objetivo, pero antes de dirigirme hacia la puerta miro hacia mi lado derecho y me encuentro con una cortina colgada en el marco de una puerta, supongo que es la habitación del padre. Bueno, me dirijo hacia mi lado izquierdo, estoy a un punto de tocar la puerta y recuerdo que me puedo meter, eso hago, me encuentro con un cuarto pintado de rosa, en las paredes yacen posters de esta banda muy famosa... One Direction, en mi lado derecho, un ventanal no muy grande a unos pocos centímetros a la izquierda de este un estante con libros, no muchos, pero hay varios, junto a este se encuentra un escritorio.  Mi lado izquierdo una cama y sobre ella, Elissa, esta mirando el techo de su cuarto, esta vestida con un short de jean y una remera negra. 

-Con permiso.- digo y me siento en los pies de la cama.

Siento como abren la puerta y era el señor que mencione anteriormente. Se acerca a Elissa y siento que sus intenciones no son las mejores.

-No.- dice ella con un tono asustado y sentándose de inmediato en la cama.

-Oh si.- dice el viejo verde.

Me paro enseguida, él le agarra el brazo y la tira contra la pared, entro en pánico, salgo corriendo del cuarto, bajo las escaleras sin importarme que pueda caer. Salgo corriendo de la casa mientras escucho los gritos de Elissa pidiendo que pare. Me encuentro con una persona que va pasando por la vereda en frente de su casa, no se muy bien como hacer para entrar a su cuerpo, así que solo me acerco, pero una fuerza muy rara me atrae a el y sin darme cuenta estaba controlando el cuerpo de este chico que nunca había conocido en mi vida. De repente entro en conciencia y entro corriendo a la casa, subo las escaleras corriendo y entro en el cuarto de ella, no estaban, me doy vuelta y voy al cuarto de él, estaba Elissa tirada en el cuarto desnuda mientras que la mierda de su padre, estaba durmiendo muy tranquilo en su cama. Elissa levanta la mirada y  me ve.

-Vamos.- le digo con tono de dulzura, la levanto del piso, ella se cubre, me saco la chaqueta que lleva puesto este chico y se la doy, ella llorando la acepta.

-¿Quien eres?- pregunta en sollozos.

-Eso no importa, ¿estas bien?- en realidad no sabia el nombre de este chico, pero recordé la regla de 10 minutos- tengo que irme

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-Eso no importa, ¿estas bien?- en realidad no sabia el nombre de este chico, pero recordé la regla de 10 minutos- tengo que irme.

-Está bien.- dice en un tono triste, pero no llora más.

-Cuídate.

-Eso haré tu igual y gracias.- me dirigí hacia las escalaras y las baje- Oye! tu chaqueta.

-Consérvela- le grito ya llegando al último escalón, salgo por la puerta y la cierro, como hago para salir de acá ahora?  o lo más importante, la violó, toda mi vida me enseñaron a respetar a las mujeres y ser caballero con ellas y viene él y la viola, y lo peor no la salve de él.

Salgo del cuerpo del chico, y entro a la casa, subo las escaleras y me dirijo al cuarto de ella. Entro y allí estaba ella, llorando en posición fetal, cubierta con la chaqueta del chico. Sentí algo quebrarse dentro de mi, tenia que protegerla no pelotudiar afuera con un cuerpo que ni siquiera era mio. 

Siendo tu Ángel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora