Un Mal Plan (SouMako) [Editando]

Fase 6: Celos

-Si así lo prefieres...

Sólo esas palabras y los chicos se encaminaron a casa del delfín.

Haru y Rin venían conversando, mientras el castaño miraba por ratos a Sousuke, esperando que al menos le devolviera la mirada, pero no había caso. Sousuke seguía mirando a los lados escapando de él.

El azabache notó que el otro lo miraba, pero estaba demasiado molesto. ¿Pero por qué? ¿Era porque Makoto le envió un mensaje a Nanase teniéndolo cerca?

¿Qué tenía de importante que se mensajeara con su mejor amigo? De seguro lo hacían todo el tiempo, aún viviendo a metros...

Sin embargo pensar más en esto aumentaba su coraje.

-¿Sousuke? - el azabache sintió su pecho quemarse al escuchar que Makoto le habló. -¿Estás enojado?

-No.

-...

Sousuke casi tuvo que tomar aire para volver a responder:

-Tal vez sólo quedé...pensando que yo debí ganar esa partida.- volteó intentando hacer como que nada pasaba, y reparó en la expresión de Makoto.

-Ah...pensé que había hecho algo que te molestó- agachó la cabeza y sonrió, pero esta era una sonrisa que no había visto antes. Parecía más bien una sonrisa triste.

Esta vez se sintió un idiota por haberlo hecho sentir mal. Suspiró y pasó su mano por el cabello del otro.

-¿Qué podrías hacer tú que me moleste? -el castaño le devolvió una sonrisa de alivio, y Sousuke miró al frente aturdido.

-¿Además de ganarte en un juego? -Sousuke lanzó un risa corta.- Yo debería estar enojado... Te robaste mis papas...

-Para empezar no debiste dejarlas tan cerca de mi...

-Eso no lo justifica.- Makoto hizo un ligero puchero, por lo que Sou sonrió.

Con la atmósfera más tranquila los chicos caminaron a la par en silencio, observando a Rin y Haru que venían peleando delante de ellos.

Al llegar se despidieron de Makoto y subieron la escalera hasta la entrada de la casa de Haru. El ojiazul los guió hasta su cuarto y le prestó algo de ropa a Rin, ya que Sou no quiso aceptarle porque en su bolso solía llevar una muda extra cuando iba a la clínica.

Rin observó con atención a Haru cambiarse, hasta que Sousuke lo golpeó y le hizo el gesto con los labios para decirle "pervertido". El pelirrojo sólo le sonrió y ya no miró más.

Se desearon las buenas noches y cada quien a dormir.

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Pasada una hora más o menos Sousuke se levantó del futón. Estiró una mano para tomar el teléfono de Haru y en cuanto lo tuvo en su mano salió del cuarto.

El corazón le latía a mil. Jamás hizo algo como sacarle el teléfono a alguien para ver sus mensajes, ni siquiera con Rin. Fue hasta la entrada y salió de la casa sintiendo de golpe el frío de la noche.

Ahora que tenía el aparato, ¿podía soportar cualquier cosa que estuviera escrita allí? ¿Qué tal si no le gustaba lo que leía? Pero... ¿por qué habría de molestarle en primer lugar?

Tocó una tecla y vio la foto que tenía de protector: eran él y los del equipo, incluida Gou. Hizo unos círculos con los dedos sobre la pantalla, dudando cada vez más. Entonces vio algo debajo que llamó su atención.