Encerrada en las masmorras

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Estoy encerrada en una habitación idéntica a la anterior, pero siniestra.

Noto una presencia que me hace sentir escalofríos y las luces empiezan a parpadear. Esto me hace pensar que hay alguien conmigo en estos instantes, algo extraño, hace poco identificado por nuestro planeta, al que le denominamos Dril.

Luego empieza a salir una sombra de la nada y reconozco cuerpos extraños. En realidad solo hay uno, pero de la conmoción me mareo. Esto me provoca ver cosas inexistentes: dos lámparas cuando solo hay una, una pared con dos cuadros cuando solamente hay uno...

Comienzo a temblar, pues el miedo reina en mí y pierdo la paciencia: grito, pataleo y hago todo tipo de movimientos para intentar resistir y no morir mientas aquel espécimen intenta tocarme.

Pienso que voy a conseguir salir de aquí cuando veo que no es más que cualquier otra persona con miedo a las cosas nuevas que te ocurren y que nunca habrías pensado que pudiese existir.

Entonces me coge del brazo, ganando esta batalla, y me hace señas pidiéndome que me siente en una silla, extremadamente cómoda, para hablar.

- jofjisdg jihas Jjoi Vjjivivj jvci o Jvjvovhi- dice con cara preocupada.

No sé que quiere decir. Le pido llorando que me deje salir. Entonces se da cuenta de que no entiendo su idioma y sale de la habitación dejándome encerrada.

Tiempo después de que saliera y me dejase allí, encerrada, en aquella claustrofóbica habitación, escuché una voz que procedía de la pared opuesta a la mía.

- Hola, ¿Minx?¿Eres tú?- creo reconocer la voz de Claire, pero no estoy segura, así que ignoro lo escuchado.

Las luces comienzan a parpadear de nuevo. Empiezo a mirar el techo, hacia el lugar de donde provenían aquellas luces.

Seguramente era el extraterrestre que anteriormente intentó comunicarse conmigo y no pudo porque no podía entenderle.

- Sabemos que os conocéis y que planeáis huir de aquí, pero es imposible salir.

- ¿Por qué dice eso? Yo no...- intento mantener una conversación cordial con aquel extraterrestre que, posiblemente, podría ayudarnos a Claire y a mí a salir o, al menos, a sobrevivir.

A esto que Claire lo escucha.

– ¿Con quién hablas? – pregunta, aún sabiendo mi respuesta.

La ignoro. Me temo que en estos instantes lo más sensato es escucharle e intentar pactar algo con él que me ayude a escapar de este espantoso lugar.

–¡No, no digas bobadas! Os escuché hablando la noche anterior. Y ahora mismo.

–Yo no dije nada, se lo prometo. No me haga daño por favor.–suplicaba mientras lloraba- quiero irme con mi papá. No aguanto más tiempo sin él. Pensaba que podría, pero lo echo tanto de menos que ni si quiera puedo dormir.

–Pues si querías tanto a tu papá, no haber entrado en la nave. Nadie te obligó a venir. Tu sola te lo has buscado.

- Yo pensaba que erais buenos, pero al parecer me equivoqué.

- Siempre repitiendo la misma frase- con tono aburrido- eres idéntica a tu madre, el mismo genio, todo.- dice para enfurecerla más- Además, nosotros pensábamos lo mismo cuando nos atacásteis con vuestras naves, tan grandes, tres veces más que las nuestras.

- Eso son chorradas. No supimos de vuestra existencia hasta que Dril comenzó a hablarnos, si se puede decir que nos hablaba, pues solamente nos hacía señas a través de las luces.

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⏰ Última actualización: May 05, 2016 ⏰

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