Capítulo 3

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Me desperté sobresaltada por la pesadilla que había tenido esta noche, había soñado que estaba en el coche cuando mis padres tuvieron el accidente y que yo no podía hacer nada. Intentaba gritar pero la voz no me salía, pegaba a la puerta para que se abriese pero nada serbia, solo podía ver como mis padres se iban muriendo en mi cara.

Decidí meterme en la ducha para intentar relajarme y así olvidarme de la pesadilla. Lo primero que hice fue quitarme la camiseta que estaba mojada de sudor, luego el pantalón y por último la ropa interior. Me quedé unos minutos observando mi cuerpo desnudo en el espejo, no me gustaba lo que veía, tenía caderas anchas, piernas gordas y un poco de barriga. No me sentía a gusto con él, siempre tenía este complejo y da igual si mis amigas me decían que tenía un cuerpazo, nunca iba a tener la misma opinión.

Después de haberme dado una ducha me puse el uniforme del colegio, el cual tanto odiaba, era una falda a cuadros grises y blancos, el polo de manga corta granate con el escudo del colegio, los calcetines granates altos y los zapatos, que menos mal que podíamos elegir. Me fije en el reloj de la pared y vi que ya eran las 7:30 y que si no me daba prisa Harry se iría sin mí y tendría que coger el autobús que tarda 1 hora.

-¡Beth date prisa que no llegamos! – Escucho la voz de Harry en la cocina.

-¡Ya voy, cógeme la comida y algo para desayunar por favor!- Le grito mientras cojo mi mochila y bajo corriendo las escaleras.

Tengo el tiempo justo para entrar en la cocina y darle un beso de despedida a Marie y decirle que no volveré después del colegio porque me iba con las chicas a comprarnos ropa. Me dirijo corriendo hacia el coche de Harry, un Audi descapotable, y de un salto me meto en el asiento del copiloto.

-¡Beth ten cuidado con la carrocería, como me la manches o le pase algo lo vas a pagar eh!- Sé que lo dice de verdad, me acerco a él y le doy un beso en la mejilla.

Enciende el coche y nos dirigimos al colegio que está a 15 minutos, enciendo la radio y busco la BBC, mi emisora favorita. En ese mismo momento suena Sorry de Justin Bieber y como una loca empiezo a cantarla a todo pulmón.

-I hope I don't run out of Time could some one call the referee. Cause I Just need one more shot at forgiveness.- Me encanta esta canción, la había marcado como favoritas en el móvil y todos los días por lo menos la tenía que escuchar una vez.

-¿Sabes que cantas fatal, verdad?- Hice oídos sordos al comentario de Harry y seguí cantándola hasta que se terminó. Me quede unos momentos sonriendo y recuperando todo el aire que había perdido.

-Me da igual, alguien me querrá así.- Me acomode en el asiento y tan solo contemplaba los edificios que teníamos a nuestro lado. Me encantaba la sensación de sentir el aire en la cara y tener los pelos al viento, además que no era de esas chicas que se preocupaban por si se habían despeinado, me hacia una coleta y punto.

-No sé cómo os puede gustar Justin Bieber, es un niñato que se mete en líos y como tiene dinero con eso lo arregla todo.- Más de alguna vez me había hecho esa pregunta, no sé cómo no le podía gustar, aunque yo creo que su música sí que le gustaba pero que Justin en si no.

-Lo que pasa es que estas celoso porque es famoso y tu no.- Harry tiene una voz increible y aunque él no lo sepa, más de una vez le he escuchado cantar en su cuarto mientras tocaba la guitarra.

-Será eso- No me había dado cuenta de que habíamos llegado al colegio hasta que siento el coche pararse y el motor apagarse.

Miro la hora en mi móvil y veo que aún quedan 10 min para que suene la campana de comienzo de clase. Me tengo que dar prisa si quiero llegar a mi taquilla y quedarme aunque sea unos minutos con Christina, Megan y Allison. Mientras que me dirijo a mi taquilla saludo algunos de mis compañeros de clase, con lo cuales me llevo bastante bien. Cuando llego a mi taquilla me llevo una gran sorpresa porque estaba la persona a la que menos me imaginaria que me estuviese esperando.

-Amber, ¿Te podrías quitar de mi taquilla o seria mucho esfuerzo para ti?- La odiaba, desde que había llegado a este colegio no me había dejado en paz. Todos los días tenia algún comentario de desprecio hacia a mí, pero no le podía hacer nada porque era la novia de Harry y me había pedido por favor que no le hiciese caso.

-Ah eres tu.- Dijo apartándose de mi taquilla.-Oye, ¿Harry no ha venido contigo?

-Sí, pero él se ha ido por su cuenta.- Mientras tanto abro mi taquilla, veo que tengo a primera hora Biología, a segunda Matemáticas y a tercera Español. Bff odiaba completamente los viernes por la mañana, más que nada porque tenía a los tres peores profesores seguidos.

-¿Y sabes si va a venir a por mí?-¿En serio me está preguntando esto? Como se nota que sabe que siento cosas por él y que me da rabia que salga con ella, pero bueno yo soy quien la ve a todas horas.

-Yo que sé, es tu novio. Llámale o algo, aunque si ya no ha venido es que ahora mismo no quiere verte. ¿Qué pena no?- Me alejo de ella y me dispongo a ir a mi clase que estaba al final del pasillo.

-¿Qué has dicho asquerosa?- Beth haz oídos sordos me decía a mí misma, sabía que si le contestaba acabaríamos mal y no quiero discutir con ella ahora y mucho menos con Harry en casa.

-Nada, que si no está aquí es que no quiere verte o que se ha olvidado de ti.- Dicho eso me dirijo a mi clase y no hago caso a los insultos que me está diciendo.


Por fin han pasado estas tres horas, han sido insoportables ya que tenía a la pesada de Megan contándome que su hermano pequeño Josh se había roto el pie y que estaba todo el día quejándose. A lo mejor en otro momento le hubiese escuchado o aunque sea haberle dado un poco de importancia, pero hoy no era el día. Aun no me había olvidado de la pesadilla de esta noche y las imagines se repetían. Le había comentado algo por encima a Megan, pero que prefería contárselo a todas a la vez.

Íbamos Megan y yo hacia el comedor del colegio donde habíamos quedado con Allison y Christina cuando me acuerdo de que Harry tenía mi comida.

-Meg, acompáñame a por mí comida que la tiene Harry.- Le cojo del brazo y la arrastro hacia el sitio donde normalmente él y su grupo está.

-¡Que! ¿Dónde Harry? Tía no me hagas esto, sabes que me pongo muy nerviosa cuando estoy cerca de Louis.- Cierto, no me acordaba que a Meg le gustaba Louis, yo le he dicho más de una vez que le hablase, pero tengo que entender que Megan es muy vergonzosa.

-Va tía que solo son 5 minutos, por favor que no quiero encontrármelo con Amber dándose el lote y si estoy contigo pues me da un poco igual.- Le suplico casi poniéndome casi de rodillas.

-Valee, pero me debes una.- Le doy un abrazo y ahora sí que si le arrastro del brazo.

Tuvimos que salir fuera del edificio del colegio porque se sentaban normalmente en los bancos de fuera, cerca del aparcamiento. Los vi gritando y haciendo el tonto como siempre hacían. Vi a Meg que estaba temblando y le di la mano para tranquilizarla. Ya estábamos donde ellos y tuve que hacer una falsa tos para que se diesen cuenta de que había llegado.

-Ejem, Harry.- Me acerco y le doy una palmadita en el hombro.

-Eh, Beth. ¿Dime?- Pasa su brazo por mi hombro y me acerca a él.

-¿Me das mi comida? Es que con las prisas de esta mañana no me la has dado.- Pongo la cara de niña pequeña con la que siempre consigo que me de lo que quiera.

-Ay esa mente la tuya, anda toma. ¿Qué harías tu sin mi enana?- Mete la mano en su mochila y saca una bolsita de papel.

-Haría lo mismo que tu sin mi.-Me acerco y le doy un abrazo y un beso.-Adiós chicos.

Justo cuando me giro choco con alguien, el cual casi me tira la comida al suelo. Menos mal que la había cogido con fuerza porque si no ya estaría en el suelo.

-Lo siento.- No me había dado cuenta de contra quien me había chocado. Hasta que levanto la cabeza y me encuentro a un rostro que conozco demasiado.

-No pasa nada Liam, a la próxima ten cuidado eh.- Dicho eso cojo a Meg y no vamos hacia el comedor donde lo más seguro es que Christina y Allison estarán ya histéricas.

Me giro para ver si Harry me esta mirando, pero en vez de su mirada me encuentro la de Liam, el cual me sonríe. Yo sin darme cuenta le sonrió de vuelta y luego continuo mi camino hacia el comedor mientras escucho a Meg diciendo lo guapo que estaba Louis.

Un final inesperado ( Liam Payne ) Where stories live. Discover now