"PLASTIC LOVE" (Yaoi)

ESPECIAL

A pasado un año desde que perdí a Max.
Darcy, Emma y yo nos hemos vuelto mas unidos y han cumplido su promesa, pues no me han dejado solo y me han acompañado en todo momento.

Mi madre ha vuelto a ser la misma loca de antes y dijo que jamas volvería a interferir en mi felicidad y ahora me acepta tal como soy, aunque la verdad no he vuelto a salir con nadie mas, y no es porque quiera quedarme atrapado en el recuerdo de Max, si no porque solo no quiero, pero no me mal entiendan, siempre llevaré a Max conmigo.

El día de hoy, las chicas y yo vinimos a la tumba donde descansa Venus, a pesar de todo, nos dio lástima su final y en realidad me di cuenta que el solo fue una víctima de la sociedad y lo único que el quería era ser amado, pero no creo que en realidad fuera malo.

-Pinche gordo, me caía mal, pero que feo fue lo de su muerte.- Dijo Darcy.

-No te expreses así de los muertos, que tal y si... Te cae una maldición.- Susurró Emma.

-Es hora de irnos chicas, tengo que cosas que hacer.- Dije, aunque solo quería irme de ahí, no soy muy fanático de los cementerios.

-Bien, vamos.

Así los tres partimos rumbo a nuestras respectivas casas.

Yo en cuanto llegue a lamia, subí año habitación, y me recoste un poco, estaba muy cansado.
De pronto, me levante y tome la caja donde estaba Max, bueno, ahora el Max de plástico, lo tenía arriba de mi cama.
Lo saque de la caja y me le quede mirando.

-Ya un año sin ti.- Le dije al muñeco, aunque sabía que no me iba a responder. Simplemente me límite a observarlo.
Pronto el sueño comenzó a ganarme, tal vez era todo ese cansancio acumulado principalmente porque volví a la universidad y ahora estaba mas ocupado.
Así que no me preocupe por mis deberes y me dormí.

-¿Alicio?.- Alguien me llamaba.-¿Alicio?.- Otra vez esa voz, pero era una voz conocida.
Abrí los ojos y no podía creer lo que veía. Max estaba completamente desnudó frente a mi, era el Max de carne y hueso.

-¡¡¿Max, que haces aquí?!!... Tu estabas...

-No, no estoy muerto, ahora estoy aquí contigo.- Respondió, y ya no me parecía el ingenuo Max de antes, ahora parecía ser mas maduro, y seguía igual de guapo que antes.

El se acerco y se acostó junto a mi, yo aun no salía de mi asombro, nunca imagine que volvería verlo, después de que murió intenté leer el hechizo una y otra vez, pero no resulto para nada, y ahora el vuelve así cono así, no lo entiendo.

-Vine porque... Quiero hacer el amor contigo... Creo que la ultima vez nos interrumpieron.- Me sonroje al recordar aquella vez en el internado.

-Yo... Yo no se que decir.

-Solo di que quieres estar conmigo.- Respondió.

Mi deseo era tan grande que no pensé mas, me giré directo a Max y lo bese, mientras pasaba mi mano por su pecho, y acariciaba cada centímetro de su piel.
El mientras tanto metía su mano dentro de mi camisa, y después desabrochó mi pantalón.

-Quiero probarte Alicio.- Yo sabía a lo que se refería, así que solo asentí.
Max bajo un poco mi pantalón e hizo a un lado mi ropa interior para después dejar al descubierto mi miembro erecto y húmedo.
Max se agacho y comenzó a darme placer oral, mientras yo intentaba contener mis gemidos, pues no quería que mi madre escuchara.

-Sabes tan bien, mi amor.- Sus palabras estuvieron a punto de llevarme al orgasmo, pero el se apartó y término de quitarme el pantalón y el bóxer, después retiro mi camisa, dejandome desnudo igual que el.