Servicio a la... espera, ¡¿qué?!

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Kyuhyun se había llevado un par de regaños por parte de Sungmin por no haberle avisado que se había "ido" luego de preguntarle si se había recuperado, el menor pensó que era porque sabía que estaba sano y que por eso soportaría sus gritos, quizá debió decirle que seguía enfermo...

No pudo justificar la falta por que no llevó un comprobante médico del hospital –el castaño dijo que había tenido un poco de fiebre y vomito, y que solo se fue a casa a dormir para recuperarse luego de tomar medicamento- así que le iban a descontar el día pero supo que Sungmin que a pesar de que le gritara y ese tipo de cosas, mintió para que le llegara el pago completo. Su jefe a veces podía ser muy amable y comprensivo.

¿Qué había pasado aquella noche? Bueno, Kyuhyun no estaba muy orgulloso de su comportamiento, se había portado como un puto hecho y derecho, probablemente su abuelo en el más allá sería capaz de presentarse ante él con el único motivo de darle la surra de su vida aunque él hubiera pedido que se le presentara cuando recién lo perdió para poder despedirse bien, pero los mayores siempre aparecían para regañarte y pocas veces para decirte que habías hecho algo bien.

El caso es que aun cuando no se sintiera orgulloso de su actuar lo había disfrutado, él al menos llevaba la mitad de la culpa ahí, había pensado en irse, en dejar al sujeto ahí pero sus instintos carnales habían sido más fuertes que su puto raciocino, ahora estaba seguro que ser amigo de Heechul le había afectado más de lo que creía.

Había tenido un día de sexo maravilloso, aun cuando más de la mitad de las veces él fue el de abajo y no el de arriba como le gustaba pero no podía quejarse, Jongwoon sabía cómo hacerlo disfrutar cada momento.

Gritó sin importarle la vergüenza y el decoro, gimió y pidió por más cuando las embestidas se hicieron insuficientes dentro de su cuerpo, algo que el mayor escuchó y le dio complacido al igual que él había hecho cuando él se enterró en el delicioso cuerpo del moreno.

Lo habían hecho por todo el lugar, Jongwoon lo sentó en una cómoda donde estaban las lociones y otro tipo de cosas, y lo había hecho abrir las piernas para tomarlo en el lugar; en la mesa, en el sofá, en la alfombra... si, no habían desaprovechado nada, solo les faltaba haberlo hecho en el techo –algo imposible para sus capacidades humanas-. Se habían comportado como dos animales en celo, Kyuhyun estaba seguro que era porque su cuerpo le estaba pasando la factura y ¿Jongwoon?, bueno, quizá solo era un enfermo sexual... tampoco preguntó ni le interesó averiguar luego de que olvidara qué era la cordura.

No falta decir que amaneció molido y cuando el sol apareció en su habitación llegó la culpa, las marcas tampoco ayudaron mucho con su conciencia cuando se metió bajo la regadera y había toda clase de manchas rosadas que resaltaban en su piel blanca, parecía un helado de esos que piden los niños con chispas o chochitos de colores encima. Dejó que su frente golpeara el azulejo frente a el.

Jongwoon le había pedido que se reunieran de nuevo cuando terminara su turno y Kyuhyun pensó que sería bueno acabar con eso. Lo había pasado bien, lo había disfrutado en demasía pero era mejor cortar lazos, todos sabían cuándo se habían equivocado y él lo había hecho, estaba seguro que el tipo de "relación" que se había creado no tenía futuro y él no tenía planeado seguir siendo el tipo de persona con la que te das un acostón por que tienes ganas.

Su turno terminó y Kyuhyun salió del restaurante para dirigirse a la misma habitación que había presenciado uno de sus momentos de locura -si no es que era el único-, el mayor debía estarlo esperando.

-Kyuhyun- sonrió acercándose y plantándole un pequeño beso en sus labios –empezaba a preguntarme cuándo terminaría tu turno- le tomó de la mano y lo acercó a la cama donde ya tenía la cena servida enfrente de esta –pensé que tendrías hambre porque no has parado de trabajar...-

-Jongwoon- dijo de forma seria –tenemos que dejar esto- el otro lo miró confundido.

-¿A qué te refieres?-

-Hemos estado haciendo esto por una semana, no digo que el sexo sea malo pero no podemos seguir así... sabes a lo que me refiero- el mayor se acercó y atrapó los labios del menor entre los suyos.

-Piénsalo mejor- dijo entre el beso –me encantas Kyuhyun, ambos disfrutamos mucho, me gustas-

"Solo te gusta tener sexo conmigo, es diferente. Estoy seguro que podrás contratar a alguien cuando me vaya y no es como que no puedas hacerlo con alguien más"

-Jongwoon...- no lo dejó continuar y coló su lengua en su boca, algo que Kyuhyun trató de ignorar pero que no pudo hacer por mucho tiempo. Le respondió y se dejó vencer una vez más.

Unos minutos más tarde estaba desnudo de espaldas en la cama gimiendo mientras el mayor lo embestía y probaba su piel.

Kyuhyun se supo patético al no poder salir de algo que el mismo había creado, por que sí, si él no hubiera fomentado nada desde el inicio no se encontraría en su situación.

Jongwoon era un maldito, se hacía de oídos sordos cuando mencionaba eso, no era la primera vez, en realidad ya iban tres días así, soltaba una palabra que iba a ese rumbo y el mayor buscaba rápidamente la forma de confundirlo y hacerle olvidar lo que había ido a hacer en primer lugar, en cambio, lo mimaba y le daba buen sexo, mejor que en los días que ambos estaban de acuerdo en llevarlo a cabo.

-No vuelvas a decir algo tan horrible- su voz sonó con cierto deje de tristeza, pero Kyuhyun no sabía si simplemente se lo había imaginado –me gustas Kyuhyun, en verdad me gustas- el menor solo resopló y desvió la mirada, sintiendo la boca del mayor acercarse y empezar a repartir besos en su piel desnuda.

El castaño se dijo que sería la última vez, ya no trataría de hablar con él ni volvería a verlo, solo se alejaría antes de que se diera cuenta por que nunca podía terminar de recitar su argumento con Jongwoon frente a el.

Sus manos le acariciaron con suavidad y sintió un estremecimiento, no sabía si era porque era la última vez que estarían juntos entregándose en esos juegos o por que Jongwoon se había dado cuenta de lo que pensaba aunque se dijo que eso sería imposible. Los dedos acariciaron su piel y sus labios le besaron lentamente toda la extensión del cuello con cierta calma, no había mordidas ni chupetones, solo besos.

La mirada de Jongwoon era distinta, ya no estaba ese toque salvaje que estaba presente en sus ojos sino algo distinto y apartó la mirada de sus orbes negros, no quería que sus ojos se clavaran en los suyos por que temía que a través de estos supiera lo que planeaba.

-Eres bello Kyuhyun- escuchó y recibió un pequeño beso en los labios.

Sintió las manos ajenas explorar su piel y se repitió mentalmente que era la última vez en que se acostaría con el.

Servicio a la habitación {YeHyun}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora