Capitulo 11/parte 2

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________ le agarró por los hombros, y le hundió las uñas en la piel suave y lisa. -No será necesario. Haré lo que me pidas. -Tal vez la próxima vez -murmuró Harry. La tocó entre las piernas, y ella dio una sacudida, conteniendo un leve chillido-. Agárrate fuerte, preciosa. ________ obedeció, convencida de que la embestiría y le haría daño. No fue así. Notaba la punta de su pene, caliente y dura, pero Harry no se movió, esperó, paciente, rígido, completamente quieto, hasta que ella estuvo a punto de gritar. -Ya puedes abrir los ojos -le dijo Harry al oído. ________ los abrió y le miró fijamente a los ojos, en silencio, jadeante, mientras él empujaba lenta, muy lentamente, haciendo que se retorciera, entrando en ella con tal lentitud que ________ se estremeció antes de que él se detuviera. Respiraba entrecortadamente y notaba cómo su cara chorreaba de sudor y lágrimas. Sujetó los hombros de Harry con tal fuerza que se le adormecieron las manos, y todo giró en torno a esa inexorable invasión, que distaba mucho de parecerse a cuanto había sentido hasta entonces. Aquello excedía los límites, era más de lo que podía soportar, y trató de apartarse de Harry, pero éste la asió de las caderas con las manos, inmovilizándola contra el colchón. -Tómame, ________ -dijo en voz baja -. Sabes que puedes. No tengas miedo. Tómame. El forcejeo cesó. ________ dejó de respirar y su corazón dejó de palpitar cuando Harry empujó hasta el final, con fuerza, apretándole la espalda contra la cama. Ignoraba lo que había exclamado cuando la primera convulsión sacudió su cuerpo. Ésa sería la primera de una serie de oleadas de intenso, asfixiante y demoledor placer que desgarrarían su cuerpo y la dejarían destrozada. Para amortiguar el ruido, Harry le tapó la boca con la mano, y procedió a penetrarla una y otra vez hasta ponerse rígido en sus brazos y eyacular en el interior de su cuerpo, firmemente contraído. De algún modo, ________ sintió que Harry se unía a ella, inundándola, y supo que estaba totalmente perdida. Harry no se movió hasta al cabo de mucho rato. Lo primero que soltó al separarse de ella y descender de la cama fue una palabrota. -jJoder! -murmuró, y pese a estar en el limbo ________ percibió el desencanto y el inexplicable y repentino enfado de Harry. ________ aguardó a que la puerta del cuarto de baño se cerrara silenciosamente y, desesperada, bajó arrastrándose de la cama. Por poco se cayó al suelo, sus piernas se doblaban como si fueran de goma. Se agarró al borde del colchón, respiró regular y profundamente e hizo acopio de las escasas fuerzas que le quedaban. No se sintió con ánimos de ponerse los tejanos. Simplemente cogió su camiseta de dormir y se la metió por la cabeza, después se dirigió hacia la puerta para salir al pasillo. Si por casualidad tropezaba con alguien ya se inventaría alguna excusa. Nadie sospecharía nunca de lo que había estado haciendo, ni siquiera ella se lo acababa de creer. Tenía que huir, salir de esa habitación, alejarse de la cama, alejarse de él, de su olor y su cuerpo, desaparecer de su vista. Se sentía rota, desorientada y destrozada, y no sabía por qué. Sólo sabía que tenía que irse antes de que él la volviera a tocar. Harry miró fijamente su reflejo en el espejo del cuarto de baño. Estaba horrible, parecía un cadáver, el *beep* que sabía que era en realidad. No tenía importancia que ella hubiera intentado matarle sólo un par de horas antes, que con él hubiera tenido, claramente, el mejor sexo de su vida. Se miró a los ojos, inyectados en sangre, y tuvo la certeza de haber cometido un gravísimo y táctico error. Un error que repetiría indefinidamente si no lograba tener bajo control a sus trastornadas hormonas antes de abandonar el cuarto de baño. ________ estaría en la cama, dormida, acurrucada como un niño y quizás incluso chupándose el dedo. Habría lágrimas secas en su pálido rostro, y una sonrisa dibujada en su también pálida boca, y él no sería capaz de dejarla sola. ¿Por qué diablos le costaba tanto aprender? Lo ocurrido no había sido un encuentro sexual fortuito, relajante y superficial. No había sido un polvo divertido y despreocupado que pretendiera cerrar un capítulo de la adolescencia. Había sido un acto de intimidad sexual de un megatón inmenso de Grado A, de fuerza cinco y nivel ocho en la escala de Richter, completamente distinto a cualquier cosa experimentada por Harry hasta entonces, y estaba del todo convencido de que a ________ le había afectado aún más que a él. Y no sabía qué demonios debía hacer al respecto. Aunque sí sabía lo que quería hacer: atarla al armazón de la cama, echar el pestillo a la puerta y **** hasta que los dos estuvieran demasiado cansados para pensar, querer o preocuparse por nada. Quería tirársela durante tanto tiempo y con tal intensidad que a mediados de la siguiente semana ________ tuviera aún orgasmos. Quería poseerla de todas las formas habidas y por haber, para luego marcharse y no volver a caer jamás en la tentación. No sucedería tal cosa, sería condenarse. No recordaba qué narices había sentido a los diecisiete años, pero intuía que debía de ser condenadamente parecido a lo que sentía ahora. Se había vuelto a excitar. Paso a paso, se recordó. Paso a paso. Mañana sería otro día y ya pensaría en el modo de reparar el daño que iba a causar el pequeño episodio. Con un poco de suerte se desharía de ________ y la convencería de que se fuera por una temporada, dándole así la oportunidad de estar a solas con Sally y el resto de la familia. Si jugaba bien sus cartas ella se sentiría demasiado violenta cerca de él, lo que anularía la lealtad profesada a Sally lo suficiente para tomarse unas cortas vacaciones. Justo el tiempo necesario para poder llevar a cabo lo que le había traído hasta aquí. Tenía que averiguar la verdad de lo ocurrido dieciocho años antes, cuando alguien disparó a Harry Styles. A ________ ya no iba a poder sonsacarle nada más; aun en el supuesto de que tuviera más información, estaba tan enterrada en su subconsciente que no saldría a la luz ni con un sacacorchos. Tendría que desviar sus esfuerzos. George y Tessa habían estado allí aquella noche, y George era el tipo de persona que siempre estaba merodeando y observando. A lo mejor había visto algo. Warren y Patsy, así como el novio que ésta tenía entonces, también habían estado. ¿ Habría habido alguien más, espiando, esperando a que llegara la oportunidad de poner fin a la vida del inquietante he redero? Tenía que ponerse manos a la obra, dejar de perder el tiempo con ________ Smith, quien no iba a proporcionarle nada más que el mejor sexo de toda su vida. Pero sólo eran las dos y pico de la mañana. No amanecería hasta al cabo de unas horas, horas que podría dedicar a vencer la resistencia de ________ y conseguir que hiciera exactamente lo que él quería, sin más timidez ni protestas semivirginales. ****. Puede que se hubiera acostado con ella con eficaz minuciosidad, pero tenía el desagradable presentimiento de que probable mente se había jodido a sí mismo y sus planes con mayor eficacia si cabe. El fuego se había apagado, dejando la habitación a oscuras. Debería correr el cerrojo; había cometido una estupidez al no ocuparse de ese detalle antes de tocar a ________. Warren era perfectamente capaz de presentarse con una botella de whisky y la tediosa intención de revisar los planes una vez más. Tal vez a Harry no le hubiera importa do, pero habría echado a perder el ya de por sí vulnerable ardor de ________. Caminó hacia la puerta y se detuvo, consciente de pronto deque algo había cambiado. La cama estaba vacía. ________ había recogido su ropa y se había largado. Qué alivio, se dijo. Se sentía aliviado. Se había ido antes de que las cosas se complicasen aún más. Harry se sentía demasiado vulnerable, demasiado atraído por los ojos azules de ________, por su pálida boca, su sedoso pelo y su inexperto y absolutamente maravilloso cuerpo. No le cabía ninguna duda de que hubiera podido estar a la altura de las circunstancias con admirable inventiva durante el resto de la noche sin implicarse en exceso, pero le sería mucho más fácil no sentirse tentado. ¿Adónde habría ido ________? Le extrañaría que hubiera vuelto a la cama plegable de la biblioteca; en este momento tendría mucho miedo de verle cara a cara, y no querría ir donde él pudiera encontrar la. Probablemente estaría en la ducha, frotando con ahínco cualquier indicio de sexo que hubiera en su prístino cuerpo. Probablemente, estaría llorando. Naturalmente, no era la clase de mujer que acostumbrara a sucumbir al llanto. Lloraba cuando tenía un orgasmo, cuando perdía el control de su cuerpo o sus emociones. El resto del tiempo las mantenía fríamente a raya. Pero apostaría cualquier cosa a que estaba de pie en alguna ducha de la casa, llorando. Y él no podía hacer absolutamente nada al respecto. Esperaría a volver a verla al día siguiente para pensar en cómo manejar la situación. Sus instintos eran prácticamente infalibles; cuan do la tuviera delante, sabría cómo proceder. Tal vez una mirada lasciva y una patada en el **** serían lo más eficaz para desembarazarse de ella. Eso, y contárselo todo a Sally. Sally ni se inmutaría. Permitió que Harry Styles, siendo adolescente, torturara a ________ sin remediarlo. Con tal de que su querido hijo permaneciera a su lado, sería capaz de sacrificar a ________ hasta mil veces, y ésta, lo admitiera o no, lo sabía. A lo mejor ________ ya se había marchado. A lo mejor cuando bajara a desayunar ie darían la noticia de que había ido a visitar a sus amigos de la universidad. No sería de extrañar. Era una mujer valiente, fuerte y decidida, pero él había destruido todas sus defensas. Se tumbó en la cama. Olía deliciosamente a sexo, a sudor y a ________. Quería que volviera con él y que le deseara con tal intensidad que le hiciera temblar. Gracias a Dios, se había ido corriendo. ________ estaba en la ducha, llorando. Le envolvían las caricias del acto sexual, las marcas que él había dejado en ella. Tenía manchas de sangre en el cuello y la garganta, eran de sus bocas. Se veían las huellas de los dedos de Harry en los puntos de la cadera por donde la había estado sujetando. Todavía le sentía dentro, y dudaba que esas sensación fue a desaparecer algún día.

Gracias por leer....mañana la seguiré

El impostorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora