Cap 8 .: La despedida

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+++DAYAN+++

-Ey, Elena, ¿Estas bien?- dije mientras me acercaba a ella

-Que si estoy bien, como quieres que este bien eh, como quieres que lo este si el único hombre que he amado nunca se tiene que ir a una guerra injusta y no se si lo volveré a ver y me quedare aquí sola cuidando a…-dijo y se callo

-¿A quien Elena?- pregunté curioso

-A nadie, tranquilo, solo que no quiero que te vayas- dijo mientras me abrazaba y lloraba en mi hombro

-Elena, se que esto te costara creer, pero te juro por mi vida, que volveré y estaremos juntos te lo prometo, nos iremos de este pueblo incluso si quieres pero te juro que estaremos juntos pase lo que pase siempre recuerdas?- dije mientras la besaba, y me ponía a llorar yo también

Nunca me dio miedo la muerte, nunca me dio miedo ir a otra batalla, pero ahora que había encontrado a Elena, había encontrado una manera de apreciar la vida y de luchar por ella

Al rato Elena se separo de mi, y nos pusimos a comer, no hablamos mucho, era algo normal, pero solo con las miradas que nos mandábamos nos bastaba.

Terminamos de comer y Elena se fue corriendo al baño, la seguí y estaba vomitando, la sujete el pelo y cuando termino después de limpiarse la cara se abrazo a mi

-¿Qué te pasa Elena?

-Nada, me habrá sentado mal la comida con la noticia y eso- dijo mientras se ponía a llorar otra vez

La volví a abrazar, y nos sentamos juntos en el sofá, ella seguía llorando y yo solo me dedique a acariciarla la espalda para que se tranquilizara, poco a poco se quedo dormida en mis brazos, yo ni si quiera me moví me quede pensando en la maldita guerra

Que tendrá, que hace que a la gente le ciegue la ambición, mata las amistades y destruye el amor, hace que la gente se traicione y saca lo peor de la gente, lo odio, odio este mundo odio ser lo que soy, porque la vida no me puede ver feliz, no llevo aquí casi ni un mes y ya me tenia que volver a marchar en batalla

Pasaron las horas y Elena por fin se despertó, se estiro, se froto los ojos y me miro dulcemente, aunque en su mirada se notaba la tristeza

-Hola, Dayan

-Hola Elena, ¿Qué tal dormiste princesa?

-Bien, estaba muy cansada

-No pasa nada pequeña

Estuvimos un rato hablando, riéndonos, abrazándonos, besándonos, vamos aprovechando el tiempo que nos quedaba, ya que era poco, mañana teníamos que coger el tren a las seis de la mañana

Deje que Elena se duchara mientras yo hacia la cena, prepare algo sencillo unos filetes y una ensalada, a la media hora Elena salió del baño

Nos sentamos a comer, hablamos reímos e incluso jugamos un poco supongo que ninguno de los dos nos queríamos olvidar de nada de lo que viviéramos

Pronto llego la hora de ir a dormir, cuando llegamos a la habitación la empecé a besar con locura y pasión, pero a la vez con mucho amor, ella me devolvía el beso con el mismo amor que yo. Y a si poco a poco nos dejamos llevar por el amor y la pasión

Estábamos los dos abrazados en la noche, la luna llena se colaba por la ventana y iluminaba el bello rostro de Elena, el cual me miraba

-¿En que piensas princesa?

-En lo mucho que te voy a echar de menos

-No te preocupes Elena, volveré aunque sea lo ultimo que aga

+++ELENA+++

Enterarme de que Dayan volverá al campo de batalla me rompió el alma, yo ahora no le iba a decir que estaba embarazada, creía todas sus promesas de que iba a volver, por eso no le diré nada no quiero que este pensando en cualquier cosa, quiero que este centrado y vuelva aquí a mi lado con nuestro hijo

Dormí toda la noche del tirón, me encontraba muy cansada y el hecho de que Dayan se iría no ayudaba para nada, me desperté porque note frio en la espalda, me di la vuelta y vi que Dayan, se había levantado ahora estaba sentado mirando hacia la ventana, me abrace a el y aspire su olor quería tener todos los recuerdos posibles de el

Una hora mas tarde, nos encontrábamos en la estación de trenes, mucha gente se despedía de los soldados, y ahí me encontraba yo abrazada y ahogada en un mar de lagrimas despidiéndome de Dayan, no quería que se fuera, pero era su deber

-Pasajeros al tren!!!-grito el maquinista, mientras me separaba de Dayan y el me limpiaba las lagrimas que no dejaban de caer

-Tranquila princesa

-Mas te vale Dayan- dije mientras le besaba

-Te quiero vale?, no lo olvides nunca, te amo, te amo , te amo- dijo entre beso y beso

Finalmente nos separamos y el se dirigió al tren, yo me quede allí hasta que el tren empezó a partir, Dayan se asomo por la ventana del tren.

-Volveré Elena, te lo juro aunque sea lo único que agá, TE AMO

Y finalmente el tren se alejo de la estación de trenes de Charleroi

Carta de un soldadoWhere stories live. Discover now