Carta de un soldado

Cap 9.: La carta

+++DAYAN+++

La despedida de Elena, fue mas difícil de lo que me llegue a imaginar, pero no importa porque volveré, si lo hare, pese a quien  le pese

Cuando montamos en el tren, todos teníamos rostros apagados, supongo que cada uno estaría pensando en su chica o su familia, y otros simplemente tenían miedo a la muerte como la mayoría

El trayecto se hizo eterno, al menos para mi, y eso que estuve jugando al poker con Enrique, Tyler y Louis, los muy capullos me hacían trampas, porque básicamente yo no sabia jugar, pero gracias a ellos me eche unas risas durante un tiempo

Finalmente llegamos al cuartel, donde dejamos nuestras pertenencias y como siempre las mismas palabras del sargento:

-Bueno soldados, tenéis tres horas para prepararos, hacer lo que queráis, pero esta es la última batalla y tenéis que estar al cien por ciento- y dicho esto se fue

Como solía ser  habitual, todos se sentaban a escribir cartas, a relajarse o simplemente a dormir un poco, yo solía mirarles con cara de aburrido, pero desde que llegue solo deseaba hacer una cosa. Escribir una carta a Elena diciéndola todo lo que no la pude decir antes de irme y puedo que no sea lo mas romántico, pero tengo que decírselo aunque sea duro, merece saber todo lo que pasa por mi cabeza

Charleroi,

21 de agosto de 1914,

Querida Elena:

“ Hace horas te deje de ver y aun recuerdo tus palabras, ayer al subir al tren, al volver al frente de batalla.

Dicen que la guerra acabará pronto pero es mentira, no quiero engañarte ni poner esperanzas en mi vida.

Por la ventana veía campos convertidos en trincheras, frente a mi las caras que no tratan de disimular las penas, muchos miramos las fotos que aun tenemos, yo tengo la tuya delante mientras te escribo esto.

Hoy al llegar al cuartel han dicho que pronto atacaremos, que nos preparemos, que si queremos el sacerdote nos dará consuelo, algunos bromean con que podrían ser las enfermeras se agradecen esos chistes que alegran a duras penas.

Tengo miedo, miedo a morir, mientras escribo esta carta me tiembla la mano del pánico, y es que pensar en balas, granadas, y el dolor me horroriza, pienso en la deserción, pero el miedo me paraliza

Gracias por estos días, que me regalaste tu amor, por darme algo por lo que luchar, arroparme con tu amor, recuerdo nuestro primer baile y me da la risa, tú que eras tan tímida, sonriendo con cara de niña.

Bailamos tanto rato entre caricias y miradas y nos escapamos, íbamos juntos a la playa, fueron noches inolvidables, las que pasé a tu lado, segundos eternos cuando el tren se fue alejando.

Ahora voy a luchar, no sé por qué ni para que, mis ideales se perdieron, tanta muerte sin un por que tantas desgracias, tanta sangre, que no se puede enmendar, tantas cosas que solo la muerte me hace olvidar

Me dio tanto, por no haberte conocido antes, una guerra nos junto y nos separa demasiado pronto.

Deseo volverte a ver, pero si no se diera el caso, quiero que sepas, al menos, que yo te amo.

No quiero despedirme sin unas últimas palabras, decirte que si muero, lo último que veré será tu cara.

Te quiero tanto, que siento agobio porque tu no estas, este será mi ultimo día, y no te podre olvidar, hago esto por ti, no quiero que sea en vano, querida Elena me despido de ti diciéndote que yo te amo.

Si esta carta la recibes dentro de unas semanas, sigue tu vida, no te ilusiones, pero siempre serás mi amada.”

Terminé de escribir la carta con lagrimas cayendo de mis ojos directamente a la foto de Elena, después de entregarla al cartero del ejercito nos dispusimos a coger las armas para ir a la última batalla, mi destino ya estaba escrito y no podría cambiarlo, lo que tenga que ser será

Me despedí con un abrazo de Enrique, Tyler y Louis, porque aunque les viera en el campo de batalla, quien sabría si alguno caería, espero que no caiga ninguno de ellos al fin y al cabo eran mis amigos, sin más dilaciones fuimos corriendo hasta nuestra trinchera cuando todo volvió a ser como antes, no había nada, solo silencio. Solo guerra

+NARRADOR EXTERNO++

En el pueblo de Charleroi, después de varios días, llego una carta con un agujero de bala que decía. Carta de un soldado, que se marcho a la guerra, y el sobre se encontraba a nombre de Elena.

Nadie supo jamás el destino del soldado, y jamás encontraron a Elena, por lo tanto la carta nunca entregaron