The Alpha's Mate

Capitulo 2: Mía

Capitulo 2: Mía

Sentí su rango de autoridad por la manera en la que me hablo, sabiendo que el era el jefe de la situación. Tenía miedo, pero sabía que podía manejar la situación.

Creo.

- Eres humana – dijo un poco impresionado

Lo pude ver mejor  y me di cuenta de lo guapísimo que es. Tenía cabello castaño desordenado, ojos cafés penetrantes, facciones como si fueran dibujadas y su cuerpo claramente llamaba la atención.

- Que yo sepa si – le respondí seriamente

No quería que el supiera que yo se sobre la existencia de los licántropos, mucho menos que soy hija de un matrimonio ni que mi hermano es un desertor en este minuto. Lo único que quería era que me dejara ir para poder llegar al pueblo y listo .

- Soy Josh, Beta de la manada – me dijo tranquilamente.

Lo mire incomprendidamente, como si no supiera de lo que estaba hablando. Sabía que tenía un rango importante.

- ¿Manada? ¿de que hablas? – le pregunte “confundida”

- Tienes olor de lobo por todo tu cuerpo, aparte que por estos territorios no hay humanos – Me hizo saber – Sabes perfectamente de lo que te estoy hablando – dijo completamente seguro.

- Bueno, cree lo que quieras. Me tengo que ir – le dije y justo cuando comencé a avanzar en la dirección opuesta llego con velocidad inhumana al frente mío.

Una vez mas cerca de mí se percato de la sangre seca que tenía adherida en las manos, la de la ropa no se notaba mucho ya que era negra.

 - Tengo que llevarte con el Alfa para ver que hacemos, aunque no seas la primera humana que sepa de nuestra existencia, sigue siendo inusual. – me comento ya mas relajado - ¿Estas herida? – me pregunto viendo mis manos y mis zapatos

 - No – respondí secamente

- Bueno, esto haremos, te voy a dejar en un hotel para que te puedas bañar y comer algo; también te pasare algo de ropa y mañana vamos a hablar con el alfa – me explico

Genial, gusto lo que no quería.

- Esta bien – respondí

Comenzó a caminar hacia el este y yo caminaba al lado de el , sin hablar, estaba demasiado preocupada por Adam como para entablar una conversación y el probablemente le aviso al Alfa por la mente. Los licántropos que pertenecían a las mimas manadas tenían esas habilidades, prácticamente hablaban por la mente,  eso era lo único que me gustaría tener por que la verdad la idea de convertirme en un animal peludo de cuatro patas no llamaba mucho mi atención.

 De repente salimos del medio del bosque y nos encontramos con una camioneta roja y algo grande. Me abrió la puerta y le respondí con una ligera sonrisa. Una vez dentro el tal Josh prendió la radio, la única música que sonaba era country así que asumí que estábamos al sur de estados unidos.

 - Te vez muy joven ¿cuántos años tienes? – me pregunto amablemente.

 - Dieciocho ¿tu? – le pregunte para seguir la conversación

- Cumplí veintidós hace poco – admitió

Abrí un poco la ventana, dejando que el aire entrara e invadiera mis pulmones.

- ¿Le avisaste a tu alfa de la situación? – le pregunte curiosa, en una de esa tenía una oportunidad de convencerlo para que me dejara ir .

 - No – dijo negando con la cabeza – aparte no pareces una amenaza para la manada y mientras haya alguien que se encargue de ti no hay necesidad – me contó sinceramente