10: Una gran noticia y un nuevo miembro en la familia

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James

– ¿Cómo te sientes?–le pregunto a Isa

–Mal, estoy muy cansada y estas náuseas me están matando sin contar el mareo

Isa lleva unos días así: mareada, vomitando y cansada. Son las 7 de la mañana y desde hace 5 días que ella se levanta a esa hora a vomitar.

Ya estamos tocando febrero y ella necesita estar bien porque supuestamente en esta época del año los turistas llegan por la temporada, pero la pobre se ha sentido tan mal que he estado pensando en llevarla a un doctor.

–Isa, te he dicho que lo mejor es que llames a un doctor, te ves muy mal–le digo sosteniendo su cabeza en el lavamanos para limpiarle la cara

–James, probablemente sea una infección o algo. Recuerda que comencé porque la noche anterior había tomado demasiado

–Si pero la resaca no dura una semana. Mi Luz por favor ve a un doctor

–Mi amor por favor no me lleves–me dice llorando en mi hombro. También ha estado muy extraña, ayer lo que hizo fue gritarme por no haber lavado los platos, luego en la noche se puso caliente pero al final le dio sueño muy repentinamente

–Isa, ayer falte a trabajar pero hoy tengo que seguir resolviendo unos asuntos. ¿Iras a trabajar hoy?

–No puedo. Por favor trata de llegar temprano–me dice a punto de acostarse a dormir otra vez–y tráeme un helado grande, un paquete de cotufas y una caja de bombones

–Lo hare

En el camino llevo pensando la razón por la que Isa se siente tan mal. Puede ser una infección, un virus o que solo no está bien del estómago. Pero me preocupa tanto eso que aún siento que no es eso lo que la tiene así.

Al llegar a mi trabajo Ricardo se me acerca.

– ¿Cómo se siente? Ally me lo contó

– ¿Qué te dijo ella?

–Que no ha ido a trabajar porque tiene una infección en el estómago

–Sigue igual. Esta mañana no pudo ni levantarse

–James... ¿Qué es lo que tiene Isa exactamente?

–Mareos, náuseas, sueño, cansancio...

– ¿Ha estado comiendo más de la cuenta?

Me pongo pensativo y recuerdo que lo que me pidió Isa al salir.

–Si tal vez un poco, nada del otro mundo. Solo me pide un helado u otras cosas con dulce como comida chatarra

–James, yo tengo una amiga ginecóloga que le puede hacer unos exámenes...

–Ella no quiere ir a un médico

–No lo sé James, eso que me dices me suena muy extraño

Desde que Ricardo me dijo eso no puedo parar de pensar en lo que le pasa a Isa. No me pude concentrar en mi trabajo porque solo pensaba en ella y en lo que tiene. Ella no es alguien que sufra del estómago, tampoco es habitual que ande de esa manera. Puede ser que solo está enferma.

Isabella

– ¿No vendrás hoy cierto?–me pregunta al otro lado de la línea Ale

–No puedo, vomite esta mañana

–Isi, si quieres que vaya a tu casa solo avísame

–Sí, yo lo hago

Vomite dos veces. Pero como ya me siento mejor me prepare un gran plato de pasta con carne, caraotas y una taza de chocolate caliente. Justo me tenía que enfermar ahora.

Con Amor, Te Odio (PyL #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora