Akumatizado

Capítulo 1

Gabriel Agreste estaba buscando por todas partes de la mansión, pero solo no podía encontrar lo que buscaba. Empezaba a enfadarse y preocuparse, ¿que podría haber sucedido? La única persona que conocía la caja fuerte detrás de la pintura de su amada esposa, era Nathalie...

- ¡Nathalie! -grito con voz potente y firme desde su oficina.

-Aquí estoy señor, ¿qué sucede? - contestó luego de llegar de otra habitación de la enorme casa.

Al mismo tiempo que sucedía esto, un chico de cabellos rubios y unos hermosos ojos verdes pasaba por enfrente de la oficina de su padre mientras platicaba con su amigo Plagg.

-Me pregunto porqué Ladybug habrá actuado de esa forma con Lila, eso no es propio de ella... -le comentó Adrien.

-Ay no lo sé. Tampoco sé cómo es que te preocupas tanto de esas cosas cuando simplemente podrías estar comiendo queso -le contestó Plagg y tragó un pedazo de queso de un solo bocado. Adrien lo miró despectivo, e iba a replicarle, pero olló una conversación y decidió esconderse para escucharla.

- ¿Donde esta el libro? -preguntó Gabriel algo fastidiado por la búsqueda sin victoria que había realizado.

- ¿A qué se refiere señor? Esta en su caja fuerte, como siempre -respondió Nathalie confundida.

-No está ahí Nathalie, yo no lo tomé, y tú eres la única que conoce sobre el libro además de mí.

-Señor, no estará pensando que yo lo tomé, ¿cierto? -preguntó con cierta inquietud.

-Preferiría no hacerlo, pero no tengo otra opción. Fuiste la única a quien le confié este secreto, y mientras ese libro no aparesca, me temo que tendré que tomar ciertas medidas. ¿Entiendes a qué me refiero? -continuó.

-Sí señor -contestó.

-Por favor, retírate -concluyó Gabriel, y Nathalie no pudo hacer mas que obedecer y desear que aquel libro que misteriosamente había desaparecido volviera al encuentro.

-Oh no, mi padre despedirá a Nathalie y todo es mi culpa -susurró Adrien para sí mismo pero logrando que Plagg lo oyera -Tengo que regresárselo y confesarle que fui yo quien lo tomó -dijo y corrió decidido hacia su habitación sin que alguien descubriera que estaba escondido.

Al entrar a su habitación cerró la puerta y comenzó a buscar el libro en su mochila de la escuela. Pero no estaba ahí.

-No está -comentó Adrien asustado - ¿Pero cómo habrá sido...? Por supuesto, Lila debió haberlo tomado cuando se me cayó mi mochila, ¡así es como se enteró de Volpina! Pero bueno, quién sabe ya dónde se encuentre ese libro, así que no tengo de otra más que confesarle a mi padre que lo perdí... -Concluyó sin más remedio con un poco de remordimiento.

-¡Pero Adrien! Ya sabes cómo es tu padre, ¡si le dices eso te irá muy mal! -agregó Plagg preocupado.

-Lo sé, pero no tengo otra opción -aclaró y con paso decidido se encaminó a la oficina de su padre.