Un Poco De Ella

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¡Pero que demonios!

Me levanté del sillón después de colgar la llamada con Kumiko y al pasar un rato reflexionando mientras miraba a la nada.

¡Vendran aquí!

Llevaba un tiempo sin ordenar mi hogar.

¡DEMONIOS!

tomé las bocinas y las conecte a mi móvil colocando un poco de música para ambientarme colocando una de Colplay "Viva la vida"

Comencé limpiando los traste, sacudiendo los muebles, barrer, trapear, incluso cambiando la decoración... Antes de que me diera cuenta ya eran las 2:00 am

Me tire en la cama cansada pero con un poco más de tranquilidad después de mi arduo trabajó anterior.

Sato (POV)

Caminábamos por las calles de la ciudad, la castaña caminaba al frente dirigiéndonos mientras tarareaba.

Takeshi cargaba una bolsa con víveres para merendar mientras estudiábamos... Aunque yo me negué Takeshi me trajo prácticamente a rastras.

Suspire.

-Bien es aquí- dijo la chica apuntando el gran edificio justo enfrente.

Takeshi y yo miramos el edificio algo sorprendido.

-¿Se van a quedar mirando o que?-río la castaña - yo también tuve la misma impresión... La primera vez- miro el edificio con una ligera sonrisa pero una mirada melancólica, estiro los brazos - Vamos-

Entramos al lugar y era bastante moderno, subimos al elevador, la chica presiono el botón 7.

-Esto es increíble- susurro Takeshi mirando a todos lados como un niño en una dulcería.

Ya en el pasillo correspondiente caminamos por el lugar hasta la puerta con el número 202.

-aquí es-anuncio la chica y toco un botón al lado de la puerta, era un timbre.

Pocos segundos después la puerta se abrió dejado ver a la pelirosa.

Traía el cabello suelto un poco húmedo lo que hacía que se le ondulara un poco, un pantalón doblado arriba de sus tobillos, una blusa de manga corta color blanca con lunares negros.

-Hey- saludo Kumiko

-oh... Bienvenidos- abrió por completo la puerta - pasen- dijo sonriendo

Todos entramos notando una sala con televisión de muchas pulgadas, algunos estantes con libros, al fondo un comedor y supongo una cocina, también habían dos puertas, era un lugar bastante grande.

-Joder que lugar- soltó Takeshi mirando el lugar

-Je, gracias- Inoue sonrió, tenia unas pequeñas ojeras.

-Trajimos los aperitivos- dijo Kumiko levantando sus manos con las bolsas.

-Podemos dejarlas en la cocina... Deja te ayudo- tomo una de las bolsas de las manos de la castaña.

"No sabré mucho pero... Tengo una amiga que valoro y aprecio con todo el corazón"

Esas palabras... Parece que no fueron mentira.

Inoue asomo la cabeza mirándonos con una sonrisa - Pueden sentarse donde gusten-

-Gracias- respondimos por inercia Takeshi y yo, nos sentamos en los sofás de color hueso con cojines rojos, yo en el más grande y Takeshi en el mediano.

-Que pasada... -

-¿Sorprendido?-pregunto la castaña con una sonrisa triunfante en su rostro, mientras cargaba con cuatro vasos de cristal con diseño de fresas.

Pink and Black Donde viven las historias. Descúbrelo ahora