Pink and Black

Trato y Amistad

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¿Pero qué demonios estoy haciendo?

La solté y me aleje de ella dando un paso hacia atrás sentí que mis mejillas también se ponían algo rojas, cubrí mis labios con el dorso de mi mano.

-¿Qué fue lo que...?- la interrumpí

-¡No fue nada!- dije algo exaltado

Ella desvió la mirada -entonces lo olvidare con una condición- dijo desviando la mirada con las mejillas rosas

-¿Cuál es?- pregunte recuperando un poco la compostura.

-No le digas a nadie que estaba llorando...por favor- pidió

-vale no le diré a...-

-¡NANAO ESTAS BIEN!- la castaña entro a la enfermería corriendo, traía todo el uniforme desordenado.

Inoue la miro sonriendo débil mente - sí... me lastime un poco pero no es para preocuparse- la castaña miro su mano y suspiro, después me mirto

-¿Tu qué haces aquí?- pregunto

-solo vine a entregarle su móvil - respondí mostrando el celular en mis manos

Ella analizo mi rostro- que amable de tu parte- me sonrió, solo la mire y después a la peli rosa, le extendí su móvil y ella lo tomo.

-bien creo que me voy- dije y camine a la salida, cerré la puerta detrás de mí ¿Por qué demonios la he besado? Sentí de nuevo los nervios ¿Qué me pasa?

Inoue (POV)

¿Por qué había hecho aquello? Quiero decir, esta mañana me dijo que no le agradaba y ahora me besa... aunque solo fue en la mejilla, mi corazón aun late muy rápido.

-Nanao ¿estás bien?- pregunto Kumiko mirándome con preocupación.

-s-sí no te preocupes- respondí nerviosa - por cierto ¿cómo sabias que me lastime?...- pregunte

Ella me miro - lo escuché y salí corriendo- respondió sonriéndome.

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Kumiko (POV)

(Hace unos minutos)

-¡Jo Que ganas tengo!- corrí apretando la vejiga tenía unas horribles ganas de ir al baño, al doblar la esquina pude ver el letrero distintivos de W.C

Corrí y entre a uno de los escusados, cerré la puerta y me dispuse a hacer mis necesidades, sintiendo como una horrible carga era liberada, di un suspiro de alivio.

-Oye te enteraste, la chica cerezo tuvo un accidente en el gimnasio- Dijo una voz, al parecer eran dos chicas quienes estaban en el tocador.

-Oh si la vi yendo a la enfermería- Menciono la otra.

¡NANAO SE LASTIMO!

Abrí la puerta azotándola mientras me acomodaba la falda de mi uniforme.

-¿Qué fue lo que dijiste?- tome a una de las chicas de los hombros

Me miro nerviosa -la chica cerezo se lastimo en el gimnasio- respondió

-ah ¡demonios!- la solté y salí corriendo en dirección a la enfermería como alma que se la lleva el diablo, recuerdo haber dejado atrás a algunos chicos que monitorean los pasillos, mi amiga es lo más importante, esa es mi política.