Capítulo 4- CAMBIO DE VIDA

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Más tarde me invitó a salir con él, muchos medios se hicieron eco de nuestra relación, incluso nos echaban fotos con algo tan sencillo como ir a ver muebles, teníamos que ir a ver muebles para decorar mi nueva habitación en su casa a las afueras de la ciudad, yo quería una habitación de princesa y combine los colores blancos, rosa y negro, quedó realmente preciosa, el me pagó prácticamente todo, dijo que ya que era su casa el me lo pagaría.

 

Al principio pasaba varios días en mi casa, que me pillaba más cerca del trabajo, y varios en la suya, hasta que finalmente me mudé con él definitivamente.

 

Era como vivir en una mansión era enorme, tenía dos plantas más el sótano, que era una sala de juegos con billar y barra de bar. en la segunda planta estaban las habitaciones,había cuatro habitaciones, dos de invitados algo más pequeñas que las principales, y las dos principales, una era en la que dormíamos los dos, con baño individual y una cama doble enorme, y la otra era mi habitación de princesa, allí tenía mi propio ordenador, un vestidor, un baño para mi, era como mi casa dentro de esa gran casa.

Me iba cada mañana al trabajo, al que me llevaba él en coche ya que le pillaba de camino a su aseguradora.

 

Parecía que la vida me iba realmente bien.

 

Venía una asistenta dos veces por semana a limpiar y planchar la ropa, por lo que en casa no había mucho que hacer, solo había que hacer la comida y poner la lavadora, la compra la hacíamos por internet cada tres o cuatro sábados, así que en casa no había mucho que hacer, en lo que a tareas del hogar se refiere.

 

Por suerte cuando él estaba trabajando y yo en casa algunas noches que volvía antes del rodaje de la telenovela tenía mi cuarto, con mis estanterías, mis libros, mi ordenador, mi ropa. Tenía un vestidor bastante grande, casi podía decirse que era como otra habitación.

 

Así que las noches que él volvía algo más tarde yo me dedicaba a leer, a mirar cosas por internet. Adoraba mucho mirar a las bloggers de internet que siempre daban ideas para vestuario y maquillaje, también miraba vídeos de ellas, tampoco tenía mucho que hacer cuando no me apetecía leer.

Un día, mientras estaba en el rodaje  me comunicaron que estaba nominada a unos premios televisivos y asistirá a una gran gala junto con algunos compañeros del reparto. Eso me hizo sentir que por fin el trabajo que estaba haciendo valía la pena, es como si todo por lo que has trabajo necesitará ser agradecido con una estatuilla.

 

Se lo dije a Paul, y se alegro bastante por mi, o eso me dio a entender. Así que durante los días venideros no dejaba de  pensar en eso, que me pondría, como iría maquillada, el peinado. Por suerte tenía algunas ideas gracias a los blogs.

 

Y llegó el día, fui con un vestido rojo largo precioso con partes de encaje, compre unas extensiones para hacer que mi pelo pareciera más largo, me lo ondulé y le puse algo de brillantina. Para el maquillaje opte por un ahumado en negro con pestañas postizas de infarto, y un gloss color rosa bebé.

Me sentía totalmente una estrella, Paul me acompañó al photocool y nos inundaron todos los flashes, fue maravilloso, adoraba todas esas miradas. En la gala nos invitaron a todos a cenar, como ya me habían dicho, me nominaron, no gane, la telenovela si se llevó algún premio. Pero en verdad no me importo, el hecho de estar nominada ya era como una atención a mi carrera.

 

Me lo pase muy bien, y a Paul se le veía contento por mi, ese día no pude ser más feliz.

Llegaba la nueva temporada de la novela, y al acabar la última, mi personaje, que había alcanzado bastante protagonismo, a cabo con una depresión, así que en la productora me dijeron que debía engordar un poco y teñirme el pelo de un color oscuro. Yo valoraba mucho mi papel en esa serie, tenía muchos seguidores, así que lo hice, descuide mi dieta y me teñi el pelo, comencé a comer mucha comida basura para engordar.

 

Algunos medios me sacaron con algunos titulares algo ofensivos sobre mi cambio de imagen.

Mi camino a princesa ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora