Aquellas palabras hacen que un escalofrío recorra toda mi espina dorsal para después llegar a cada centímetro de mi piel. Es difícil creer que vivió atormentada todo aquel tiempo. Ella habla de una regla de silencio, pero no estoy segura de lo quiere decir. No puedo sacar conclusiones todavía.
Pensar en todo eso y en los horrores que tuvo que pasar mi madre me provoca dolor de cabeza. Me pregunto si el tener constantemente pesadillas es algo hereditario. Me rio al pensar en ello. Guardo de inmediato la carta de mi madre con la otra que conservo, recojo mi habitación y limpio los estragos que ha causado la persona que ha entrado en ella mientras estaba ausente. Me recuesto en la cama y poco a poco voy cerrando los ojos hasta quedarme profundamente dormida. Es mucha carga para mí. Tengo que atrapar al asesino de mi madre y protegerme de la oscuridad de la Universidad Clart From.
De pronto despierto acostada en un bosque frío y oscuro. Intento moverme, pero algo me lo impide. Mis piernas no responden a mis suplicas mentales, puedo sentir el aire golpear mi rostro; parece que mis labios están suspendidos en el frío y mis parpados empiezan a luchar por cerrarse en contra de mi voluntad.
A los pocos segundos puedo escuchar los pasos de alguien. Curiosamente no siento ningún temor; es entonces cuando una enorme sombra se para frente a mí e intenta tocarme con sus largas manos. De fondo se escuchan risas de niños. Cada vez que aquella presencia intenta acercarse a mí, yo me hundo más y más en el suelo, que en pocos segundos se convierte en lodo.
«¡Blody!»
Se escucha una voz grave que hace retumbar el lugar; las risas de los niños dejan de escucharse para dar paso a gritos desgarradores y llantos... Trago saliva al ver que del cielo caen rosas rojas. Siento cómo me desvanezco y despierto.
El sonido del despertador me empuja a meter la cabeza debajo de la almohada,. Son las seis de la mañana y observo el espacio vacío que ha dejado el espejo. Me levanto perezosamente y me dirijo a la ducha, donde una vez en contacto con el agua caliente, me siento mucho mejor. Me arreglo eligiendo unos shorts rojos, unos Converse del mismo color, y una sudadera blanca. Me hago una coleta, cojo mis cosas y bajo de inmediato. Al salir, me encuentro con Alejandro.
—Hola, Blody, ¿cómo estás? —me pregunta con aire fresco.
—Bien, ¿y tú? —respondo acercándome a él.
—Preparándolo todo para empezar el día; estaré un tiempo en la biblioteca y después en el gimnasio, tendré que ayudar a entregar los uniformes —dice al tiempo que mira por detrás de mí para después apartar la mirada rápidamente.
—Entonces supongo que nos veremos más tarde, Alejandro —contesto.
—Llámame Alejo, me gusta más —Me guiña un ojo—, de esa forma podremos ser amigos.
—Si estás seguro, entonces te llamaré así.
—¿Sabes? Tienes unos ojos muy hermosos Blody —dice al tiempo que da dos pasos más hacia mí.
ESTÁS LEYENDO
BLODY (Un Crimen Perfecto) © [COMPLETA]✅
Mystery / ThrillerBlody, una chica de 20 años que quiere estudiar psicología, decide matricularse en una prestigiosa universidad para señoritas al sur de California. En un principio todo transcurre con normalidad hasta que tiene que enfrentarse a una serie de sucesos...