Quizá después de todo, tu no me amabas tanto como decías.
Y yo no te necesitaba tanto como pensé.
Porque bueno, míranos.
Hemos seguido nuestro camino, casi como si nada hubiese pasado.
Como si nunca te hubiera conocido y como si no te hubiese amado con todo lo que tengo.
Como si la vida y sus reclamos y nuestros tropiezos, no nos hubieran destruido tanto, que costaba mirarnos al espejo.
Henos aquí, caminando de la mano de otras personas.
Diciendo otros nombres, suspirando en otros brazos.
Hablándole a ella, con el mismo tono con el que solías decirme que era el amor de tu vida.
Besandole a él, con los mismos labios que un día recorrieron todo tu cuerpo.
Somos sobrevivientes a lo que muchas veces dijimos que no íbamos a poder soportar.
"No puedo vivir sin ti" dijiste.
Puedes, por dios, puedes.
Lo hiciste.
Porque amor, seguiste tu vida y yo la mía.
Y hemos llegado tan lejos, que tal vez el error más grande fue pensarnos como indispensables.
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Frases para olvidar.
RandomUna recolección de todo lo que me callé, de todas las cosas que nunca dije. Cualquier parecido con la realidad, es mera coincidencia. (Todas las frases y escritos que aparecen esta obra me pertenecen.)