Si me buscas, puedo decir que no?

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-¿Me darías tu número? -Sonrió coqueta- es que eres muy divertido y me gustaría que siguiéramos hablando-


Wonwoo se descolocó en su sitio, había acompañado a Mingyu en su amena charla para simpatizar con los otros grupos que llevaban más tiempo que ellos en el negocio de la música, quería creer que era coincidencia que todos con quienes habían hablado eran chicas.


Debía de admitir que la joven osada que se atrevió pedir el número en frente de todas era muy bonita, cuando el más alto empezó a escribir en el celular de la chica, las demás aplaudieron entusiasmadas, hace rato que había escuchado murmurar entre ellas, pero ninguna se atrevía.


Por supuesto él era ignorado, bueno...se lo había buscado, en toda la conversación se mantuvo dos pasos atrás, con su rostro inmutable, lo que no sabía es que esa pose fría, acompañado de su porte natural, había llamado la atención de muchas, que nerviosas por el muchacho de pose guay, aún menos eran capaces de acercarse, además estaba el hombre alto que estaba a su lado, que las miraba con odio cada vez que alguna se disponía a aproximarse al pelinegro.


¿La llamará?¿ De verdad se comunicarán? Por que las intenciones de la chica bonita eran más que claras, al instante un dolorcito en el pecho que reconoció como celos lo abarcó.


Estaba que se moría de celos!


Mordió su labio tratando de no demostrar por fuera lo que sentía en su interior y optó por escapar. Mingyu jamás le prometió algo formal, no era quién para reclamar, el peligris estaba dándole chance a las chicas dándole su número frente a él, solo le dió su primer beso y le hizo entender con extrañas palabras que tendría más, y estaba muy feliz con eso, creyó que era el día más feliz desde hace mucho tiempo...



"Necesito otra copa"



Con este pensamiento-solución a sus problemas, con determinación comenzó a escabullirse del lado del peligris, este lo tenía acorralado entre unas mesas y su cuerpo, cuidadosamente se agachó y corrió bajo el mueble. Listo! No parecía que el otro se hubiese dado cuenta, miró por última vez a Mingyu, se veía tan guapo, era increíble pensar que un hombre así lo besó, si pensaba de esa manera, se podía dar por bien servido, no esperaba nada y obtuvo un maravilloso primer beso. Ahora solo necesitaba distraerse y no ver como su gran amor coqueteaba con alguien más.


-¿Te puedo invitar un trago?-


Un momento. Dio un saltito del susto y giró encontrándose con un muchacho que lo dejó sin palabras, era un idol muy conocido, Había coincidido con él muchas veces en sus presentaciones, desde lejos era lindo pero de cerca era más guapo aún.


-Me estas preguntando a mí- titubeó.


-No- rió, su actitud se le hizo muy tierna.


-oh! Lo siento.- Se inclinó avergonzado haciendo una reverencia y se dispusó a irse, pero no alcanzó a avanzar mucho, el muchacho lo tomó del brazo.

Por vez primera (Meanie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora