Okay

67 4 0
                                    

THEO

Me despierto con Shaily en mis brazos y no puedo evitar sonreír al ver como se agarra a mi brazo.

La sacudo un poco y se revuelve, soltándome y tapándose la cara
con las sábanas.
-cinco minutos-gruñe y yo me río y la abrazo por la cintura.
-¿qué tal si diez?- se destapa los ojos y me mira con una ceja enarcada.
La sonrío y se vuelve a tapar entera.
Me tapó con ella y la abrazo bajo las sábanas.

Oigo el sonido de mi móvil y veo el número de Marco.
-¿dónde estás?
-hola a ti también- pongo los ojos en blanco y lo oigo suspirar.
-Theo, no me vengas con educación porque no estoy de humor. Tengo que ir a veros a ti y a Shailene. ¿ dónde?
-en su casa.
-¿ qué haces en la casa de ella a estas horas?- lo oigo reír y suspiro.
-Recuerda, Marco, para el resto del mundo es mi novia. Así que si me apetece dormir en su cama tu no vas a ser quien me detenga.

-tranquilo, tigre.- ríe y me dan ganas de estrangularlo- la chica está..... Muy bien- tiene un tono lujurioso, como si supiese un secreto que nadie más sabe.- pero si tanto te interesa no me importa buscarme otra.

Cuelgo la llamada sin despedirme.

Este tío es un puto viejo verde. Dios, es asqueroso. Solo de imaginármelo con Shaily me dan ganas de vomitar.

-¿ya estás despierto?- se vuelve hacia mí y asiento serio- ¿ estás bien?
Asiento otra vez y agarra mi móvil.
-Marco- se lo arranco de las manos y frunce el ceño.- ese hombre me da asco, es tan....- se estremece y dejo el móvil en la mesilla de noche.
-¿te apetece desayunar fuera? - asiente y se va a ducharse. Aprovecho para ponerme la ropa de ayer y me tiro en la cama.

De repente la veo acercarse ruborizada hacia la habitación. Coge una camiseta básica, unas mayas y abre un cajón del que intenta esconder un sujetador rojo con unas bragas a juego.

-te queda mejor el negro- le digo, en realidad solo vi aquél tirante pero con esa piel tan suave no puede evitar mirarla.

Me saca el dedo y va corriendo al baño

Llegamos a una cafetería y, tras desayunar Shailene se coge un batido de frutas y volvemos al apartamento para hablar con Marco.

Actuando Por AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora