Me respondió con una gran sonrisa en su rostro, tomó mis piernas y las subió para que quedaran sostenidas en sus hombros y entró en mí, esta vez dejé que el gemido se escuchara, él volvió a sonreír mientras entraba y salía en un delicioso ritmo que me hizo apretar la colcha. Nos mirábamos fijamente, ambos estábamos sumergidos en el inmenso placer que experimentábamos, el no poder besarnos intensificaba aún más la excitación y el goce del momento, además, que podíamos observar plenamente las expresiones retorcidas de cada uno, en tanto, nuestros gemidos se mezclaban en el aire envolviendo la habitación. Zayn aumentó el ritmo de sus movimientos más y más, enloqueciéndome, haciendo que me perdiera completamente en el deleite que su cuerpo me proporcionaba y de pronto una nueva y cálida sensación recorrió mi interior cuando él llegó al orgasmo y sus fluidos me inundaron provocando que yo también llegara al éxtasis emitiendo un intenso grito que se unió al de él.
Volvimos a amarnos un par de veces más, casi sin descanso, nos cubrimos de besos y caricias, repetíamos nuestros nombres sin cesar, a la par de apasionadas palabras que antes no decíamos y que hacían que la experiencia fuera aún más satisfactoria.
– Hasta mañana Zayn – dije con la voz adormilada y los ojos casi cerrados.
– Hasta mañana corazón – me dio un pequeño beso en la mano – te amo.
– Yo también te amo.Nos quedamos dormidos con las manos y las piernas entrelazadas. La alarma incesante del despertador sonó y a mí me parecieron que habían pasado apenas cinco minutos desde que me dormí. Me estiré para apagarlo y sentí su brazo aferrado a mi cintura y su cuerpo pegado al mío, era inevitable que una sonrisa se dibujara en mi rostro. Tomé su mano para retirarla y levantarme, pero me apretó más contra él.
– Zayn, tengo que ir a trabajar – repliqué.
– No vayas.
– Amor, yo qué más quisiera que quedarme aquí contigo, pero en verdad no puedo, estoy llevando casi la mitad de las cuentas de la agencia y hay mucho que hacer – dije colocándome encima de él.
– Repórtate enferma, por favor – suplicó acariciando mis brazos.
– En serio que no puedo, además, recuerda que Hugo nos vio ayer juntos, seguro no lo creería – respondí enmarañando aún más su cabello.
– ___, no debe preocuparte el quedarte sin trabajo, yo tengo muchos contactos, podría recomendarte en la mejor agencia de Nueva York.
– Te lo agradezco Zayn, pero prefiero ganarme las cosas por mí misma, no quiero que digan que si tengo trabajo es por ti y no por mi talento.Me sonrió, deslizando su dedo pulgar por mis labios y luego me besó en tanto su mano bajaba aún más allá de la cintura haciendo que mi pulso se elevara mientras sentía como su cuerpo reaccionaba debajo del mío.
– Zayn, por favor, tengo que meterme a bañar – objeté en un susurro.
– Sólo otro beso, ¿sí? – respondió dando la vuelta para quedar sobre mí.
– No quiero llegar tarde – dije mientras sentía como frotaba su sexo con el mío y besaba mi cuello, alterándome más.
– Te prometo que será rápido – musitó en mi oído y luego lo lamió.
– Aún nos queda la noche de hoy – exclamé acariciando su espalda.
– Faltan muchas horas – dijo entrando en mí nuevamente.
– Dijiste que... ah... sólo un beso... – señalé con la voz entre cortada moviéndome a su ritmo constante.
– No puedo evitarlo... tengo hambre de ti... – agregó moviéndose más rápido y besándome frenéticamente en tanto mis uñas recorrían su espalda.
– En serio... ¿no te tomas nada? – pregunté sintiendo aún más la intensidad de sus movimientos dentro de mí.
– No corazón... tú eres mi única droga.Embistió en mí unas veces más hasta que exploté e instantes después él lo hizo también y luego volvió a besarme en los labios.
– Buenos días, corazón – exclamó mirándome y sonriendo.
– Buenos días, cariño, ¿ya puedo ir a bañarme?
– ¿Es necesario?
– Sí, ya te dije que debo ir a trabajar.
– Está bien – se acostó a un lado y me levanté de la cama – ¿quieres que te lave la espalda? – añadió en tono sensual.
– Hoy no, tengo que ducharme rápido y sé que contigo sería imposible – respondí entrando al baño y cerrando la puerta sintiéndome feliz como nunca antes.
ESTÁS LEYENDO
Grande Tentación(Hot) Zayn y tu
Fiksi PenggemarTres simples reglas a seguir: #1 No nombres, #2 No preguntas personales, #3 No lazos afectivos. Son las indicaciones que el desconocido da a ____ en su primer encuentro, pero ¿Para ambos será igual de simple seguirlas al pie de la letra? Chicas está...