capítulo 12

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En todo el tiempo que caminabamos yo estuve callada me límite a escuchar, no podía hablar después de ver lo que ví. Joseph y Leonard no hablaban como siempre hablaban seco.
Pasamos por tiendas de ropa, a las cuales yo quería entrar, pero estando con un par de chicos no creo que quieran, también de zapatos.
Entramos a una donde vendían bolsos y Leonard y Joseph entraron a agarrar unos para ellos.
El centro comercial no tenía electricidad así que no había alarma.
Paramos a una tienda de donde vendían artículos de deporte y ellos se llevaron unos bates, quisieron pasar por la ferretería para buscar clavos me imagino, fuimos rápido y agarraron unos clavos y fuimos a la tienda donde venden artículos de cocina y Leonard se llevó un abre latas y Joseph vió por los cuchillos.
Joseph y Leonard quisieron pasar por la tienda de cómics pero no la consiguieron. Así que fuimos a la de comida.
-Vamos a llevarnos unas papas.-dijo Joseph.-tengo hambre.
-Estoy igual.-dijo Leonard.
-tengo tentación de entrar a todas las tiendas de ropa-dije yo.- pero no da tiempo ahora.
-yo quiero ir a la de videojuegos.-dijo Joseph.
-¿para qué?-dijo Leonard.- si ni hay electricidad para enchufar una consola.
-cierto.-dijo Joseph encogiéndose de hombros.- ahí esta la tienda de comida.
-A POR LAS PAPAAAAS-dijo Leonard.
Y salió corriendo a abrir la puerta.
Cuando lo logró fue directo a donde la estaban las papas junto con Joseph. Yo fui por pan, y mas agua, deje unos paquetes de galletas y y los reemplace por pan.
Los tres nos encontramos en la puerta.
-¿que tomaron?-dije.
-yo tome papas, unas galletas y agua.-dijo Joseph.
-y yo papas, algunas sopas instantaneas en lata, y otras cosas en lata.-dijo Leonard.
-muy bien vamos a la farmacia.-dije.-necesito cosas de chicas y medicinas.
-¿qué cosas de chicas?-dijo Leonard.
-no te puedo decir...son cosas de chicas.-le dije con una sonrisa.
-de acueeeerdo.-me dijo entrecerrando los ojos.
Salimos de ahí a la farmacia, que quedaba unas puertas de distancia de la tienda de comida.
Al llegar a la farmacia les digo:
-Okay, busquen medicinas para la fiebre, malestar, antialergicos y vendas...yo buscare lo de chicas y otras cosas.
Ambos asintieron y fueron a buscar. Yo me dirigí al pasillo de damas y agarré las cosas de chicas lo que son en idioma femenino toallitas para cuando te llega la menstruación, y algunos jabones, quice agarrar shampoo pero no había, así que fui a lado de medicinas de la farmacia, vi a Joseph atras de la barra de donde se piden buscando y Leonard se estaba subiendo a ella.
-¿encontraron algo?-pregunté.
Del susto Leonard se cayó al otro lado de la barra sobre Joseph.
-JAJA... perdón...¿están bien?-dije.
-Yo sí.-dijo Leonard.
-claro aterrizaste en mi.-dijo Joseph.
-jeje lo siento.-Leonard se estaba parando.
-Vayan a buscar.-le dije.- yo ayudo.
Estuvimos buscando unos quince minutos, hayamos algunas cosas y nos fuimos.

Nos apresuramos a bajar. Cuando llegamos Jason, Eibell y Samantha ya estaban bajando igual, tenían cosas de camping, y algunas cosas más pero no podía verlas.
-Leonard, tienes un abre latas, ¿no?-dije.
-si lo agarré-dijo el.- tranquila.
-ya es de noche así que nos debemos quedar aquí.
-A LA TIENDA DE CAMAS.-dijeron Joseph, Eibell y Leonard.
-Es buena idea.-dijo Jason.-vamos.
Mientras ibamos a la tienda de camas vi que Samantha tenía mirada perdida y no hablaba nada, Jason la agarraba del brazo para que no se pierda.
Cuando llegamos a la tienda de camas me dió risa porque Jason tuvo que romper el vidrio junto a los demás chicos.
Al entrar Joseph y yo nos pusimos en una litera en la cama de arriba, Samantha y Jason se pusieron abajo, en otra litera se puso Leonard arriba y Eibell abajo.
-¿quién vigila?-dijo Eibell.
-Yo vigilo, ¿quién me acompaña? ¿Joseph?-dijo Jason.
-Claro.-respondió el.
-¿no dormirás?-le dije.
-no, no tengo sueño.
-yo si dormiré.
-Bueno, descansa.
-Gracias, despiertame cualquier cosa.
Traté de dormir pero no pude, me quedé despierta.
-Joseph...¿estas despierto?
-Sí, Tal...¿no puedes dormir?
-Nope...ya quiero que sea de día.
-Trata de dormir algo.
-No quiero pesadillas.
-Estoy contigo, descuida.
-Está bien, te quiero.
-Y yo a ti.
Joseph estaba sentado así que apoyé mi cabeza en sus piernas y me quedé dormida.

APOCALIPSISWhere stories live. Discover now