La traición

Capítulo 1

Abrí mi cuaderno de Tecnología en la página que el profesor nos había indicado. Estaba nerviosa, demasiado, mañana me iría de aquí. Dejaría todo esto para pasar el resto de mi vida en Londres, no me quería ir. Mi vida era perfecta tal y como estaba, tenía todo lo que una chica de 17 años podía desear. Entonces os preguntaréis ¿Por qué si su vida es perfecta se tiene que mudar? Es una pregunta que yo también me hago y no se contestar. Una mañana me levanté y mis padres me comunicaron que me tenía que ir a vivir a Londres ¿Por qué? Quien sabe, mis padres eran así de raros. No sabía como haría para contarle todo lo ocurrido a la gente que me quería.

Observé al chico que se encontraba al lado mío, me sonreía de una manera especial ¿Cómo haría para contarle que me iba? Era una pregunta que hasta hoy no me había cuestionado ¿Cómo haría para vivir sin él? Yo no me quería ir, no quería quedarme sin él. Desvíe levemente la mirada hasta mis mejores amigos que jugaban con un boli o se tiraban papeles ¿Cómo haría para vivir sin ellos? Eran las personas con las que más aventuras había vivido.

En ese momento sonó él esperado 'Pi pi pi pi' que hacía el timbre de salida. Ese sonido que todo estudiante deseaba escuchar, ese sonido que era como música para mis oídos. Me levanté de mi asiento después de coger todas mis cosas, seguida de Ashton, Maria, Laura y Aitor.

- ¿Quedamos hoy a la tarde? - Escuché como Aitor susurraba en mi oído. Me giré para dedicarle una leve sonrisa a la que él contesto con un beso dulce en los labios.

- No puedo. - Había quedado en no despedirme de ninguno de ellos, nunca me gustaron las despedidas. Siempre me ponían mal, además sabía que si me despedía de ellos nunca me iría. - Tengo que acompañar a mi madre al supermercado.

- Está bien cielo.

Después de quedarme media hora hablando con cada uno de ellos, les di un fuerte abrazó y me fui corriendo a casa. Durante todo el camino de vuelta a casa no pude evitar soltar una lágrima ¡No me quería ir! ¡Joder! No quería dejar a las personas más importantes de mi vida, sabía que sin ellos mi vida sería una completa mierda. Nada sin ellos era lo mismo ¿Os imagináis a una chica sola en Londres? ¿Qué diablos pinto yo en Londres? ¡Si ni siquiera conocía a nadie!

- Cielo, entra en casa. - Me giré para encontrarme con la dulce sonrisa de mi madre. Por alguna extraña razón yo no me parecía a ella, ni a mi padre. Eso nunca lo entendí, se supone que los hijos se sulen parecer a los padres ¿No? Tampoco nos gustaban las mismas cosas ¿Por qué? Mi madre decía que tenía un parecido a una tía mía, a la cual nunca había visto porque supuestamente siempre estaba ocupada. - ¿______ entras ya?

- Ya voy mamá. - Me levanté de mi asiento, me acerqué a ella y entre en casa.

~

Me encontraba en el esperado avión. Me había colocado los cascos, en mis oídos sonaba la canción 'Don't let me go' no tenía ni idea de quien la cantaba, solo sabía que era una canción perfecta ¡La voz de aquel chico era simplemente dulce! Siempre que escuchaba esa voz ronca un escalofrió recorría todo mí cuerpo, esa voz me provocaba sentimientos que nunca antes había sentido.

En ese momento recordé la despedida que me organizaron mis padres, un día antes nos habíamos quedado toda la noche viendo películas o hablando de todo un poco ¿Qué por que los quería? Por que sabía que ellos nunca me mentirían, sabía que me amabana mucho y que siempre estarían ahí para mí.

'Os avisamos que el avión aterrizara en el aeropuerto de Londres en unos minutos. Todo los que estéis fuera de vuestros asientos hacerme el favor de regresar a ellos. Muchas gracias' La voz del capitán del avión nos avisó.

¿Por qué? ¿Por qué me entraban ganas de mear ahora? ¿Qué debía hacer? No podía aguantar más, necesitaba ir al baño ¡Urgente! Me levanté de mi asiento y fui directa al baño. Intenté abrir la puerta pero no podía... ¿Ocupado? ¿Enserio? Me apoyé en la pared esperando a que la persona que se encontrará dentro saliera ¡Por fin! Caminé hasta la puerta que daba paso a la gloria ¡El baño! Cuando la persona que se encontraba dentro abrió la puerta el maldito avión empezó a aterrizar y cai encima de dicha persona quedando los dos encerrados en el baño.

- Lo siento. - Susurre.

- ¿____ eres tú? - Observé al chico que me acababa de hablar ¿Quién era? ¿Por qué su rostro se me hacía familiar? Pero... Lo más importante ¿Por qué sabía mi nombre?

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Hey heyy... Aquí tenéis el primer capítulo de mi novelaaaa. Me haría muy feliz que os gustará :)