Capítulo Extra III

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-Leonardo Collins Bolton, sal ya de ese cuarto, vamos a llegar tarde a la cita.- digo en nuestra habitación.

-Ya te lo dije, Alanah, mi nombre sólo es Leo, no Leonardo.- dice saliendo del baño.

-Cómo sea, vamos quiero saber el sexo de nuestro bebe.- digo acariciando mi vientre que ahora es más notable, mis otros tres hijos están con Scar.

Llegamos al consultorio después de veinte minutos, justo a tiempo.-Bien, vamos a ver a ese bebé.- dice la doctora.

LEO P.O.V

-...Vamos a ver ese bebé.- dice la doctora. Camine junto a Ally hasta la camilla mientras ella bajaba su Jean y subía su camisa, dejando ver a mi próximo hijo.-Veamos...- dice la doctora moviendo el aparato en el vientre de mi esposa.- Definitiva, es una niña.- dice.

Genial, otra princesa, en serio que amo a Alanah por hacerme tan feliz, primero con mis trillizos y ahora con otra bebé que completará nuestras vidas y eso si no vuelve a quedar embarazada.

Veo que Ally tiene lágrimas en los ojos así que las limpio con mis dedos para después, darle un beso en sus labios el cual me corresponde.

-Nos vemos en la próxima cita Alanah y no olvides tus medicinas.- dice la doctora.

-No las olvidare, gracias, Holly, nos vemos después.-se despide yo hago lo mismo y después caminamos tomados de la mano Hasta nuestro auto.

-Veo que las hormonas te están poniendo sensible.- digo bromeando ya que de nuevo tenía lágrima en los ojos.

-Sólo estoy emocionada.- dice.

-Yo igual, otro bebé y ahora sabemos que es una niña.- pongo mi mano en su vientre.- Te amo.

-Te amo mas.- me abraza y yo gustoso le correspondo.

Con ella pude obtener lo que siempre quise, una familia, amor y felicidad, ella es, fue y será mi único amor, uno verdadero.

Ahora todo lo que tengo en espacios parece una guardería, y eso me encanta, me encantan mis trillizos, mi nueva hija, mi esposa, mi empleo. Todo, Alanah llegó en tiempos de blanco y negro a darle color.

Es el amor de mi juventud, la mujer que siempre soñé, la chica que me sacaba de quicio con solo una mirada, cuando otros la miraban, y hablaban de ella como si fuera una cualquiera, siempre la defendí pero nunca sabía por que, y ahora lo sé, siempre fue el amor de mi vida, con la única persona que me sentí completo.

Incluso llevo su nombre tatuado en mi espalda, no se que haré si algo le pasa a Alanah, si pudiera, daría mi vida por ella o por cualquiera de mis hijos, son mi vida y me destruiría el corazón si llega a pasarles algo, por eso soy tan sobreprotector con ellos, no quiero que nadie los vea y más cuando Annaleigh esta volviendo a insistir en mi oficina.

-Gracias por cuidarlos, Scar.- digo.

-No es nada, sabes que me gusta cuidar de ellos.- sonríe.

Es sorprendente que mi hermanita este embarazada, solo que ella tiene menos meses que Ally, mis padres se pusieron feliz así que le dieron su apoyo.

Por el dinero que no se preocupen, le daré todo Hasta que acabe la universidad y pueda ayudar a manejar las empresas en París, que es la ciudad a la que quiere ir.

Llegamos a nuestro hogar, que aunque sea grande es acogedor, ademas con estos locos bebés necesitamos espacio y lugares seguros.

Le dimos de comer esta vez algo de papilla de pera, que es la favorita de los tres, por lo que la comieron rápidamente, después los duchamos y lo hicimos dormir.

ALANAHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora