La muerte no existe, la gente solo muere cuando la olvidan; si puedes recordarme siempre estaré contigo.
-Isabel Allende.
Londres, Inglaterra.
La noche era helada, eran casi las doce, las calles estaban casi vacías. Esa noche no había estrellas en el cielo y algo en el viento era misterioso.
-¿En serio no quieres que te lleve a casa?- pregunto Niall a Harry.
-Te he dicho que no, sabes que tu padre se enojaría si se da cuenta ¿no es así?- le respondió Harry.
-Bueno si pero evita que te secuestren ¿quieres?
-Gracias, me motivas a irme solo- dijo Harry con sarcasmo.
-Es una forma de expresar mi preocupación hacia ti, Hazz- le sonrió el rubio.
-Jamas te vuelvo a pedir ayuda en una tarea...
-ya cállate y vete, se hace tarde, adiós. Espera ¿tu me pediste ayuda a mi, en una tarea?- dijo Niall burlándose de su amigo- no me lo creo.
-Me voy- sentencio Harry dándose la vuelta para irse- Y solo te pedí ayuda en una, en cambio a ti..., mejor ni te digo.
-Yo también te quiero- le dijo Niall al rizado.
Por fin Harry empezó a caminar alejándose de la casa de su amigo cada vez mas. El frió le calaba en los huesos, su pelo volaba por todas partes, caminaba lo mas rápido que podía. Aquella tarea era muy importante y no le hubiera pedido ayuda a su amigo de no ser por eso.
En un lugar lleno de luces de múltiples colores, cuerpos sudorosos bailando, bebiendo alcohol y fumando, un chico recibió una llamada, al sentir como su celular vibraba salio del lugar, sabia lo que venia a continuación al ver el numero en la pantalla, sintió como algo desconocido le recorría el cuerpo entero. Pulso el botón de responder.
-¿Bueno?- trato de que su voz no temblara.
-Acaba de salir de la casa..., mátalo.
Respiro hondo, se puso rígido. Esa noche era la definitiva.
Colgó, no hacia falta mas palabras que cruzar con aquella persona.
Harry froto sus manos para provocar calor en ellas, el frió le penetraba los huesos y le estaba matando. Al llegar a casa se prepararía un chocolate caliente, pensó. Cada siete minutos pasaba un auto con chicos y chicas en su interior, todos ellos embriagados, era lunes ¿en que demonios pensaban? se preguntaba Harry. De repente cayó una gota de lluvia en su frente.
-No ahora- murmuro.
Seguido de esa gota varias empezaron a caer, una tras otra. Harry acelero el paso, las piernas le dolían por el frió que no pudo correr.
Cinco minutos después un auto hizo reflejar sus luces en la carretera. Harry lo ignoro y siguió caminando, tenia que llegar a casa. Su largo pelo se le pegaba al rostro y su ropa se pegaba a su cuerpo. Las luces se apagaron, el chico del auto se apeo de el, estaba temblando y no precisamente de frió, paso a paso se acerco a Harry sigiloso, saco la pistola de su chaqueta. Tenia razones obvias.
No lo pensó mas, apretó el gatillo. Su corazón latió veloz por la adrenalina, a pesar de el cruel frió sintió como sudaba. El cuerpo de Harry cayó de rodillas, el otro chico bajo su brazo, no había marcha atrás, se acerco al cuerpo del rizado, el chico tiritaba y su sangre se mezclaba con la lluvia , todavía respiraba aunque débilmente 'directo al corazón' las palabras golpearon su cabeza.
-Lo siento- dijo el chico a Harry.
-No por f... -murmuro apenas Harry.
El estruendo de la segunda bala retumbo en los oídos del chico desconocido. Los ojos verdes de Harry se cerraron para siempre. El otro chico corrió a su auto no muy seguro de poder manejar.
El cuerpo de Harry se quedo desangrando bajo la lluvia helada.
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INEFABLE ‖H.S‖
Fanfiction-Hay cosas que no hice vivo. Muchas de hecho pero qué crees que pasara después de..., la verdad no se dé que. Ella lo miro un largo rato. No lo sabía, ni quería saberlo, ¿así sería siempre? ¿Se casaría con Niall mientras estaba al lado de Harry has...
