INEFABLE ‖H.S‖

6

Aquella mañana desperté con las palabras de Niall golpeando mi cabeza. 'El show empieza mañana' No sabía lo que me esperaba en este día y no estaba precisamente lista para encararme a ello.

Sabía que las posibilidades de que todo este asunto acabara eran alucinantemente escasas, en parte, no, en gran parte Niall tenía mucha razón, no nos quedaba nada más que aceptarlo.

Miraba mi reflejo en el espejo, verme a mí misma de esa manera me deprimía realmente, no estaba ese brillo en mis ojos verdes y conocía muy bien a quien se lo había llevado.

Suspire, si tan solo le hubiera podido decir cuanto lo quería siquiera por una maldita última vez. Con el tiempo dejara de doler, me dije a mi misma pero no sabía si realmente eso era veraz.

Mi madre entro en mi habitación, a ella si le brillaban los ojos, me veía con una sonrisa que no conectaba conmigo que estaba totalmente triste.

-Niall ha venido por ti –me dijo -¿Por qué no me dijiste que ya eran novios? No importa estoy muy feliz por ustedes.

-¿Él ha venido? –pregunte, últimamente ya no lo hacía así que era toda una novedad.

¿Qué había dicho mi madre? ¿Novios? Tan solo dos semanas sin Harry, solo dos y ella esperaba que ya tuviera otra relación de la nada, que amara a otra persona cuando había perdido a otra, el amor de mi vida.

-De acuerdo, me voy.

Mi madre abrió los brazos para que la abrazara, la ira pareció darme vida entre todo mi dolor. Camine fuera de mi habitación, dejándola con los brazos extendidos, baje las escaleras hasta salir de la casa. Allí estaba Niall, en cuanto le dedique una mirada enojada dejo de verme.

-Novios, ¿en serio? –Le reclame –No sé si sepas que solo ha pasado poco tiempo desde..., ya sabes qué.

-Sé que es poco tiempo, lo siento pero mi padre...

-Sí, tu maldito padre, ya se –subí al auto antes de que me respondiera.

Todo el camino discutimos sobre el tema de ser novios, sobre la boda que nos esperaría, sobre si teníamos la oportunidad de escapar. Al final, antes de bajar del auto lo único que me dijo fue, 'se toda una actriz'

-Te voy a presenta con mis amigos –me dijo.

-Pensé que yo lo era –replique.

-Creo que ahora eres mi novia –respondió.

Nos acercamos a un auto color gris, vi a chicos y chicas en grupo recargados en el, se reían a carcajadas de alguna estupidez.

-Hola Niall –saludo Ashley Murray. Una chica pelirroja y ojos azules. El pasatiempo de Niall -¿Quién es la chica? –me sonrío falsamente, como si no supiera quien soy.

-Avery, ella es Ashley, mi amiga –o pasatiempo, pensé –Ashley, ella es Avery..., mi novia –balbuceo.

-Vaya, mucho gusto, Avery –respondió.

-Y yo soy Tyler –me sonrío un chico muy alto.

-Mucho gusto – sonreí apenas.

-Y los demás son, Lauren, James, Ed y Jesy –la ultima chica no perecía formar parte de aquella bola de falsos, me dedico una sonrisa veraz, era rubia y sus ojos parecían ser verdes. –Bien chicos nos vemos después. –dijo Niall.

Se dirigió a las gradas de la cancha de futbol, lo seguí sin tomarle importancia pero pude notar nervios en él.

-¿Qué pasa? –lo mire angustiada. –Algo pasa.

Note como tomaba aire profundamente, me miro un largo rato, era obvio que algo ocurría y no sabía como soltarme la bomba. Retiro su mochila de su hombro.

-Avery, sé que esto es difícil. Sé por lo que pasas, créeme, lo único bueno que me ha pasado desde que mi madre murió y desde que me mude a Londres has sido tú, fuiste la mejor amiga del mundo, no sé lo que sería de mi ahora si no te hubiera conocido y lo siento ¿sí? – sus ojos se ponían llorosos con cada palabra que me mencionaba. –solo quiero que sepas que te quiero, mucho. –se acerco a mí, me tomo de la mano, yo lo miraba con confusión –pase lo que pase y a pesar de todo. –sentí algo frio alrededor de mi dedo anular. –seremos mejores amigos.

Mis ojos lo vieron muy claro, mi mente se negaba, mis labios querían gritar, mi corazón se rompía de nuevo, mis piernas estaban listas para huir. Me quede observando el precioso anillo de compromiso, hermosamente maligno.

No me había dado cuenta de que lloraba hasta que estuve entre los brazos del que se suponía era mi mejor amigo. Él también se deshizo entre lagrimas, por una última vez fuimos amigos.

-¿nos vamos a quedar de brazos cruzados? –le cuestione.

-Tengo un plan –respondió.

-¿Cuál es?

-Solo espera.