El despertador sonó a las 7 a.m, como de costumbre; Pilar lo apaga y abre los ojos poco a poco."Que bien, un año más de lo mismo" pensó. Era 28 de Agosto, día de su cumpleaños número 16.
A Pilar, cumplir años le había dejado de entusiasmar hace bastante, lo consideraba una fecha más, sólo que con algunos saludos y gente alrededor fingiendo ser felices.Además de ser su cumpleaños, se había levantado de mal humor por varios factores:
1- Tenía física en la primer hora.
2- Tenía prueba.
3- Debía presentar trabajos prácticos y tarea de geografía, materia que odiaba pura y exclusivamente por su profesor.Las únicas que le subían el ánimo eran sus amigas: Tere, Victoria y Sofía, las cuatro eran amigas desde que entraron a la secundaria, y eran las únicas en las que Pilar confiaba.
Además de ellas, su humor cambiaba (sólo un poco) en la última hora, cuando tenía química, la materia que más le gustaba, o mejor dicho, la única que le gustaba. Además, su profesora, Paloma, la conocía, ya que era amiga de su mamá, la cual también era profesora en su colegio; por ende, se llevaba muy bien con ella y hasta había llegado a quererla.
La mañana transcurrió aburrida, como se lo imaginaba, algunos saludos y nada más.
Cuando llegó la última hora, Paloma entró al curso y saludó a todos normalmente, comenzó a escribir ejercicios en el pizarrón y todos (o al menos la mayoría) se dispuso a trabajar.
Como a Pilar le encantaba esa materia, terminó los ejercicios sin dificultad y fue al escritorio de su profesora a que se los revisara. Cuando llegó allí, Paloma estaba rodeada de alumnos con dudas o quizá esperando lo mismo que Pilar. Así que ella sólo dejó su cuaderno encima de su escritorio y esperó a que llegue su turno.
Su profesora estaba tan ocupada, que no leyó el nombre en el cuaderno y sólo corrigió los ejercicios.
Paloma: -¡Muy bien! ¿De quien es esto? Pilar: -Mío.
En ese momento, la miró y recordó que era su cumpleaños.
Paloma: -¡Pili! ¡Feliz cumpleaños mi vida!
Se levantó de su escritorio y le dio un fuerte abrazo. Si había algo que la caracterizaba era su buen trato y dulzura con todas las personas. En ningún momento se la ve enojada o triste por algo. Nunca.
Pilar: ¡Muchas gracias!
Paloma: -¿Cuántos?
Pilar: -16.
Paloma: - Aaay, te puedo presentar a mi hijo Nacho entonces, el cumple los 17 en Enero.Pilar se ruborizó.
Nacho...Se acordaba de el a la perfección.
Sus madres solían juntarse y ellos, al ser niños, los llevaban con ellas. La última vez que lo vio tenía 6 años.Pilar: -¿Nacho? ¡Hace diez años no lo veo!
Paloma: -Pero te lo presento igual! No soy celosa si sos vos.Y le guiñó un ojo, lo que a Pilar le causó gracia y, a la vez, vergüenza, mucha vergüenza.
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Another Love
Teen FictionPilar, 16 años Ignacio, 17 años Ambos se conocían, sus madres eran profesoras y muy amigas, pero ellos no se volvieron a ver desde que tenían 6 y 7 años. *Verano de 2014-2015...Se hablan nuevamente por WhatsApp.