Me desperté algo desorientada, para darme cuenta que estaba en mi cama; ¿Que? ¿No me había dormido en lo de Asiel? Fue lo primero que mi mente llego a relacionar. Mire mi celular para notar algunas llamadas perdidas de Sofia, a quien llame algo desorientada mientras me vestía para ir a la escuela, aunque el detalle me sorprendió, me había dormido con la misma ropa con la que ayer había ido a la pizzería.
-¿Hola? ¿Estas bien?- Fue lo primero que dijo al responder -Desde ayer te he intentado llamar y no me haz contestado-
-Disculpa tuve...- Me detuve a pensar si debía contarle o no lo ocurrido.. decidí que no -Tuve planes, y me olvide el teléfono- Dije con un tonos inseguro, aunque por suerte me creyó.
-Vale... pues apurate, no quiero tener que esperarte siempre-
-Esta bieen, nos vemos, besitos- Termine la oración y corte la llamada.
De nuevo ocurrió, no fue un sueño; me desperté con la misma ropa que ayer utilice, aun con el cuello de la blusa estirado debido a.. ¿Jhin? No estaba segura aun.
Desayune y salí de mi casa para distinguir a Asiel podando el césped, me acerque lentamente y tímidamente lo salude.
-H-hola.. ¿No iras a la escuela?- Dije comenzando a notar cierto rubor.
-No, debo hacer labores del hogar, y no tendré tiempo- En su mirada fría note algo extraño pero no pude replicar a nada a eso, sentí un frío repentino subir por mi espalda.
-Entiendo.. eh.. oye.. ¿Que sucedió a...- no llege a completar la frase que mi celular solo, era Sofia, me disculpe y me despedí de Asiel para continuar camino discutiendo sobre un vestido con Sofia.
Al llegar a la escuela nos sentamos como de costumbre y nos quedamos esperando al profesor de Literatura.
-¿Y? ¿No vendrá tu Jhin?- Dijo Sofia con un tono algo bromista.
En ese instante me volvió a la mente aquel momento en el que temí, cuando Jhin o como quiera llamarse me tomo del cuello de mi blusa.. aun así, de repente me vuelve a la cabeza Asiel, quien si no fuera por el, quien sabe que me hubiera pasado..
-No, no vendrá hoy.- Respondí con cierta frialdad notando que la directora entro al salón, anunciando que podríamos retirarnos debido a la ausencia del profesor. Alegría broto en todos, en forma de gritos y festejos, y en mi, creció una sensación de comodidad, al saber que podría pasar la tarde con Asiel.
-Vete- Se escucho del otro lado de la puerta.
Había ido hacia la casa de Asiel, y con cierta timidez toque su puerta para luego escuchar su cruda respuesta.
-Necesito hablar contigo, necesito saber que paso ayer, ¿Como entraste a mi casa a todo esto?- Dije con cierta angustia.
-Tenias tus llaves en el bolsillo, yo te avise que a la mañana estarías en tu casa- Dijo abriendo la puerta apoyándose en el marco -Y no diré mas.- Replico al final.
Con cierta incomodidad comencé a pensar si estaba comportandome como idiota, o si el era el insensible.
Esbozando un suspiro lo mire, hacia sus hermosos ojos y le pregunte con cierta dulzura -Te gustaría salir a pasear?- añadiendo una sonrisa con la esperanza de que acepte.
-¿No te dije que tengo labores que hacer? No puedo- Dijo con un tono frío.
No pude evitar reírme al ver que en el fondo tenia su computador encendido con un videojuego y algunas bebidas alrededor.
-Ya, debes asesinar demasiada gente, ¿No?- dije aguantando un poco la risa.
Miro hacia atrás y suspiro, quizá el realmente no deseaba salir.
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Rule Breaker
Teen FictionArcángeles, Demonios y Humanos. Como seria un mundo donde las razas convivieran? Y que pasaría si todo se descontrola? Una historia de Romance, Suspenso y que seguramente te gustaría vivir en carne y hueso.