The Little Girl ⌠Supernatural⌡

Capítulo 11

—Ya volvimos —Anuncia Dean entrando a la biblioteca junto a Molly, quien se notaba cansada.

—Hola, Sam —Saluda la castaña acercándose a él y dándole un beso en la mejilla. El lacio sonrió.

—Hola, Molly —Responde y luego vuelve su mirada a su laptop.— ¿cómo está Kevin?

—Bien. Resolviendo el código Da Vinci. Nada útil hasta ahora —Responde Dean tomando una cerveza de la congeladora. —¿algo sobre Cas?

—No, ¿y tú?

—No. No contesta.

—Entonces, he tratado de catalogar la red del grupo de cazadores. Sus aliados, grupos afiliados con quienes trabajaban y tenían archivos.—Informa Sam.

—¿Desde 1958? —cuestiona Dean.

—Sí, cierto. La mayoría están muertos. —afirma Sam y su hermano pasa una mano por su cara como señal de cansancio. —pero, deben ver a esto. Es diferente, revísenlo —Habla entregándole unas hojas.

—¿La iniciativa Judá?

—Un equipo europeo. Activo en la Segunda Guerra Mundial.

—¿Cazadores luchando en la guerra? —Pregunta leyendo.

—No exactamente luchando y no exactamente cazadores.

—¿Rabinos?

—¿Qué hacían los rabinos? —Dice Molly confundida.

—Eran excelentes saboteadores. Así que investigué a toda la lista y encontré a Isaac Bass. Tenía 17 años cuando se unió a la iniciativa y 85 cuando falleció, hace dos semanas. —Habla girando su laptop para que los otros dos pudieran observar la noticia. —Fue ejecutado. Se quemó espontáneamente.

—Entonces, es un caso —Entiende Dean.

—Sí —Afirma Sam y ve a los otros con cara de pesadez. Molly recostó su cabeza en la mesa y el castaño los miró con una sonrisa confusa.—¿Qué sucedió?

—Fantasma. Restaurante. Mazo.—Fue lo único que dijo la niña aún con la cabeza abajo.

—Hamburguesas con ectoplasma. Deliciosas.—Explicó el mayor con un poco de asco y su hermano lo miró ahora más confundido.—Y esta enana, acabó sola con el desgraciado.—Habla poniendo una mano encima de la cabeza de la niña.

—¿Y qué hacías tú?

—Ectoplasma. Eso pasó.—Contestó asintiendo lentamente con la cabeza.

(...)

—Molly, puedes leer libros mientras yo me encargo del asunto —Le avisa a la niña, quien hizo una mueca.

—Es porque tengo 12 y no parecería una entrevistadora ¿verdad?

—Sí —Afirma riendo un poco. —No te muevas de esa sección.

—No lo haré.

(...)

—¿Usted trabajaba con el difunto Sr. Bass? —Pregunta el administrador de la biblioteca.