Razón Por La Que Sigo Luchando

Capítulo 1

Todo comienza desde aquel día donde una joven se dirigía al gobierno a ver a la hermana de su amigo John.

Ella era una mujer de piel muy clara, de altura mediana, sus hombros eran derechos su cuerpo tenía apenas unas curvas no tan exageradas. Pesaba alrededor de sesenta kilos. Su pelo negro desmechado liso y brillante le llagaba hasta el hombro. Sus ojos marrones le resaltaban de lo redondos que eran, su nariz pequeña apenas se notaba. Al sonreír se le notaban sus dientes blancos rodeados por sus labios rojos y carnosos. Llevaba puesto un jean azul con zapatillas de plataforma un poco ancha. Tenía una remera blanca y sobre ella llevaba una campera negra de tela fina. Su pelo siempre lo llevaba un poco desprolijo con un mechón hacia el costado Ella era una mujer que había sufrido mucho en su vida, lo único que la mantenía en pie era una familia que había conocido por parte de John.

Ella estaba dispuesta a sacar a la hermana de John de la Guardería (Anastasia), ya que ella había cumplido los dieciséis años hace una semana, y no habían recibido la nota de que ya estaba decidido a qué lado seria mandada. Habían esperado un año más por Ana porque creían que todavía no sabían a qué lado iría ya que ella era un poco difícil de definir su personalidad.

La familia de Ana estaba segura de que iría al lado 'bueno' ellos conocían su personalidad más que nadie. Ellos no se atrevían a ir a reclamar por tener miedo de ser echados de sus casas ya que el gobierno les daba todo, premiaba a aquel que se 'portaba bien y era amable'.

Emma guardando su ira y tranquilizándose respiraba profundo, daba pasos largos hasta llegar a la oficina del gobernador ya era la segunda vez que iba a la casa del gobierno. Golpeo con sus manos la puerta y en segundos fue abierta por el guardia que estaba adentro con el gobernador.

-Pase- dijo el hombre alto que estaba parado a un costado del marco de la puerta.

Entró un poco tímida, observando la oficina que era un lujo. Bajó dos escalones y se acercó a la mesa donde apoyaba los brazos una mujer con vestido blanco de pelo rubio con un rodete haciéndola que la hacía ver formal

-Toma asiento- Dijo la mujer apuntando a la silla que estaba a un costado de Emma. Ella se sentó, sorprendida porque estaba equivocada de que era un hombre el gobernador.

-Hola- Dijo Emma nerviosa e inquieta sin saber a dónde mirar.

-¿Cómo te llamas?- La miró atenta.

-Emma, un gusto- Le extendió la mano para saludarla.

-Sara, Igualmente- Miró la mano de Emma con asco y no la tomó. Ella lentamente y borrando su sonrisa dejó su mano debajo de la mesa. Sara agregó -Dime, ¿A qué vienes?-

Emma -Vengo a reclamar sobre una joven- Observó la mirada fría de Sara. Se dio cuenta con tal solo tratar de saludarla que era un asco de persona la supuesta 'Gobernadora'.

Sara -¿Por qué se debe ese reclamo?- Agarró sus manos y acercó más su cara hacia ella.

Emma -Es porque ya pasó más de un año y todavía no han dicho nada sobre a qué lado la mandarían- Estaba un poco más seria.

Sara -Oh que raro, debe ser porque todavía..- Emma la interrumpe.

-...Todavía no definen a qué lado iría? Eso es lo que dicen siempre- Agregó con tono de seriedad. La gobernadora no sabía que decir.

Sara -Dime el nombre de la joven- Se acomodó y sacó su computadora que estaba debajo de su escritorio.

Emma -Anastasia Vredich- La gobernadora abrió la notebook y escribió el nombre de Ana. Se quedó mirando la pantalla un poco confundida y dijo.