diez

26 2 1
                                    


    5 de Noviembre, Carolina del Norte.





 

Eran alrededor de las cuatro de la tarde cuando Harry me dijo que tenia que irse a hacer unas "cosas" o eso fue lo que dijo cuándo le pregunte. No insistí mucho en que me contara por que se notaba que no tenia ninguna intención de contarme, aunque prometió volver más tarde a hacerme compañía.


Estaba tranquila tirada en sillón mirando hacia el patio, sin nada más interesante que hacer, cuando sonó el timbre. Me pare perezosamente y fui directo a abrir. Lo primero que mis ojos ven es al detective Holland. 


– ¿Detective? ¿Qué hace aquí? –no pude evitar sonar nerviosa.


–Tengo que hablar con usted, señorita.


Me quede inmóvil, la forma en que me miraba y me hablaba no me dejaba pensar en nada bueno.


–Necesito que me acompañe a la comisaria, no puede ser interrogada aquí.


Aun si poder reaccionar del todo, salí de mi casa y me asegure de cerrar bien la puerta. Caminamos hacia su patrulla y partimos hacia la comisaria.


Ahora me encontraba otra vez dentro de estas cuatro paredes azules, sentada en esta silla, frente al detective del caso de mi hermano.


– ¿Sabes que si estás aquí es porque algo va mal no? –lo mire atentamente. Claro que lo sabía.


–Sí, ¿Qué ocurre? –pregunte con miedo.





 
–Sé que me mentiste Scarlett– mis manos comenzaron a sudar, tenía miedo. ¿Había descubierto lo de las carreras? ¿Algo peor? ¿Podría ir presa?




–Scarlett–volví a la realidad con esa voz que tanto me intimidaba.




 –Lo siento. ¿De qué mentira me habla?


–Sé que conoces a Harry Styles. Pero no como me dijiste, sé que tienes una relación con él. Sé que lo ves y pasan el tiempo juntos.


Inmediatamente a mi cabeza vino ese auto negro que estaba fuera de mi casa hoy temprano y me perseguía.




– ¿Ustedes mando a alguien a vigilarme? –pregunté con un toque de enfado en mi voz.



 –Sí. ¿Tiene algún problema con eso? ¿Algo que ocultar? – saco su estúpida libreta y escribió algo allí.


–No, pero no es de mi agrado. Me gustaría un poco más de privacidad.


– La gente que esta relacionada con un asesinato no tiene privacidad. Ahora me puede decir, ¿Por qué mintió sobre su relación con el joven Styles?


Sus palabras me dejaron muda, no sabía que decir, realmente estaba en aprietos. La mirada del detective solo lograba ponerme más nerviosa. No tenía escapatoria.


–Harry y yo solo pasamos tiempo juntos desde que mi hermano murió. No somos pareja ni nada, solo conocidos. Yo necesitaba a alguien que realmente conociera a Cameron para sentirme mejor y lo llame a él.



–Aja... ¿Y cómo puedo estar tan seguro de que no me mientes nuevamente? –anotó algo en su libreta.




 –No lo sé, yo solo le digo la verdad.




–Bien Scarlett, ¿puedes decirme donde estabas la noche que se dice que asesinaron a Cameron Dallas?



– ¿Cree que yo tengo algo que ver con el asesinato de mi hermano? –remarque la palabra mí.



 
–Yo nunca dije eso, lo has dicho tú y ahora contesta mi pregunta–su mirada victoriosa me hacía dar ganas de querer tirarme sobre él y matarlo. No literalmente, yo no soy una asesina joder.




 – Estaba trabajando en el bar de Roque ¿Me puedo ir ya de aquí?




 –Claro.




 
Me levante y rápidamente me fui, no aguantaba un segundo más su mirada sobre mí.





 
Cuando llegue, Harry Styles estaba en la puerta de mi casa sentado, o casi acostado, con los ojos cerrados. Creo que estaba dormido.




 –Harry–ni se movió– ¡Harry!




– ¡Ay! ¿Qué paso? –Reí cuando vi lo asustado que estaba.




– ¿Qué rayos haces durmiendo en la puerta de mi casa?


–Vine y no estabas aquí así que te espere–su cara somnolienta solo lo hacía ver más lindo.


–Ah sí. Tuve que ir a la comisaria– hice una pausa y él espero atentamente a que continuara– Saben que mentimos Harry.


Su rostro cambio drásticamente, podría decir que veía miedo en sus ojos. Y nunca había visto miedo en los ojos de Harry Styles.


 –Espera, ¿Sobre qué?


 –Saben que nos conocemos, que pasamos tiempo juntos. El auto de hoy a la mañana–rápidamente mis ojos recorrieron el lugar y más allá en la esquina, descubrí al mismo auto de hoy– son policías. Me están vigilando.


 Harry miro hacia allí también.


–Joder. ¿Cómo no nos dimos cuenta de que esto pasaría?


– Ya no importa Harry, gracias a esa mentira somos sospechosos del asesinato de mi hermano.


The mystery | h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora