once

6 0 0
                                    

5 de noviembre, Carolina del Norte.

Por la cara de Harry pude notar como casi no le importaba lo que acaba de decirle. No le importaba que era sospechoso de un asesinato. Esto me puso medio incomoda ya que me llevó a pensar en cuantas cosas había echo a lo largo de su vida como para no sentir miedo de que la policía crea que es un asesino.

Estos pensamientos me llevan de nuevo a pensar en lo poco que sabia de él. En como había desaparecido hace casi dos años atrás y en todo el misterio que lo rodeaba. Su voz me sacó de mis pensamientos

–Estaba pensando que podríamos comer algo–la tranquilidad en su voz me descoloca un poco.

–¿No escuchaste lo que acabo de decir, Harry? –mi pregunta suena casi irónica.

–Si te escuche, pero tienes que relajarte Scar, los dos sabemos que no tenemos nada que ver. Si te preocupas demasiado les estarás dando el gusto de verte nerviosa y que cometas errores. Justo lo que ellos quieren.

–Yo no estoy tan segura de que ninguno de los dos tenga algo que ver–al instante me arrepiento de lo que dije. No lo pensé demasiado, pero es que estuve tantos días a su lado dejándome llevar por esa maldita sonrisa que deje pasar algo importantantísimo. No se absolutamente nada de él.

Frunce el ceño y no puedo evitar que mi mente piense en lo guapo que es–¿Pero que dices? ¿Crees que yo si tengo algo que ver?–el tono en su voz hace que suene ridículo. Al instante siento cansancio. No podía lidiar con el en este momento, no sabia ni que estaba diciendo ya. Quería enfrentarlo pero no me animaba.

–No lo sé Harry. Simplemente quiero recostarme un rato. Estoy cansada–decido que ya es hora de por fin entrar a mi casa, ya que toda esta conversación en la vereda no tiene mucho sentido. Abro la puerta y respiro hondo. Estar aquí se me empieza a hacer raro, extraño mucho la presencia de Cam.

Quiero cerrar la puerta cuando recuerdo que estaba siendo seguida por el maldito de rulos. Quien pone una mano impidiéndome la acción.

–Oye, no vas a dejarme fuera y menos después de lo que acabas de insinuar.

Lo miro y otra vez sin siquiera pensar le respondo–Bueno, haz lo que quiera. Estoy demasiado cansada como para obligarte a que te vayas.

–¿Por que quieres que me vaya? ¿Qué te dijo la policía Scarlett, algo sobre mi? Dime, seguro fue para asustarte y que te alejes de mi.

Me giro rápido hacia él intrigada–¿Qué podría decirme la policía para que me asuste y me aleje de ti? ¿Qué saben?

Enseguida nota como metió la pata y suspira.

–Supuse que tal vez te habían dicho que poseo cargos por agredir a un policía o por un par de robos sin importancia–abro los ojos ante su comentario. ¿Robo sin importancia? Creo que solo el le resta importancia a semejante barbaridad.

–¿Sin importancia? ¿Un par? ¿Qué carajos Harry, eres ladrón ahora también? –no podía dejar de hacer preguntas. Y quería la respuesta ya, a cada una de ellas.

–Joder no, lo hice un par de veces pero en el pasado. Ya no soy ese y lo sabes.

–Maldición Harry no, ¡No lo sé! No sé absolutamente nada de ti. Solo un día te fuiste, Cameron siempre actuó sospechoso respecto a eso. Si quieres seguir viéndome quiero saberlo todo. O te tendrás que ir, y para siempre.

–Tu sabes que era bastante desagradable. Que siempre me lleve el mundo por delante, que no me importaba nada ni nadie–lo corté, todo esto no era nada nuevo.

–Si Harry ya lo sé, eras un maldito egocéntrico. Dime algo que no sepa por favor.

Lo escucho suspirar de nuevo. Se mueve unos metros para poder sentarse en mi sillón. Parecía que se venia una historia.

The mystery | h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora