50 sombras de Dalas

Mas que amigos

-Se está haciendo tarde, deberíamos ir a casa ya.-
-Si.- Dije, no sabía lo que iba a pasar. Estaba nerviosa.
Estábamos llegando a su casa, abrió la puerta del portal y subimos por el ascensor, vivía en un cuarto piso.  Al entrar me quite la chaqueta y dalas me la colgó en un perchero que había, su casa era muy grande y bonita.
-Que te apetece para cenar?-
A ti. Dije en mi mente.
-Em, nose jaja elige tu.-
-Bien pues pediré una pizza, que te parece?-
-Genial!-
La pizza ya había llegado y nos la comíamos mientras hablamos.  Me lo pasaba genial con dalas, era muy divertido.  Ya acabamos, estaba llena.
-Bueno, me lo he pasado muy bien, adiós me voy ami casa.-
Le dije triste pero con una sonrisa.
-Si quieres puedes quedarte!
-Enserio? pero no quiero molestar.
-No molestas en absoluto, me lo he pasado muy bien con tigo.
-Bueno vale, gracias!
Me puse muy contenta, no sabía que me diría eso, me fui al baño a ducharme y cepillarme los dientes, me puse la ropa y salí, dalas estaba en el salón. Me acerqué.
-Hola!
Dalas me sonrió.
-Hola.   
Lo quería besar, pero tenía miedo de que él no quisiera. Me atreví, me acerqué a él, lo besé, él también, no lo podía creer, me puse encima de él, me quito la camiseta y me cogio en brazos, me llevaba a su habitación.
-Te quiero.-
Me dijo, yo lo miraba, y le dije que le quería más.