ENTRE CENIZAS

CAPITULO 2

Aunque cerré mis ojos cuando Andriu me empujo, no aguanto mas la curiosidad, así que los entrecierro y veo que Andriu está muy raro, una lagrima cae de su rostro y toma impulso para clavar el cuchillo en mi cuerpo.

Efectivamente el cuchillo ha sido clavado en mi brazo izquierdo; el dolor es insoportable, Andriu me besa la frente y corta el lazo con el que amarro a Larry, en el momento en que lo hace Larry está inquieto pero aun así Andriu se le acerca y le susurra algo, pero no alcanzo a oír nada de lo que le ha dicho, estoy muy débil he perdido mucha sangre no tengo ni la más remota idea del porque Andriu actuó de este modo, cuando termina de hablar con Larry, se va corriendo del lugar sin mirar hacia atrás, lleva su mano ensangrentada junto a una bufanda que tenía en mi cuello.

Larry se acerca a mí como el más valiente, creo que es más poderoso de lo que creía, para hacerme sonreír y mas en esto momentos, Larry me lame la mano y la frente, ese gesto solo puede significar una cosa "quiere que lo siga y este con el"; decido hacer caso, me levanto muy despacio con su ayuda, damos unos cuantos pasos y me desvanezco, me siento muy débil, la herida es muy profunda y creo que me estoy  desangrando, Larry me lame la frente pero no puedo seguir ya no tengo más fuerzas, me quedo acostada en el suelo. Larry me lame la mano y se recuesta a mi lado.

-mi amigo, mi querido Larry, te quiero mucho, debes protegerte y ser muy cuidadoso si muero aquí.

Larry me mira y empieza a llorar; no me deja seguir hablando porque se para rápidamente y me ladra, en ese momento veo a Larry;  me doy cuenta que es en realidad un perro muy valiente y hermoso, se va corriendo tan rápido como nunca lo había visto, ni siquiera cuando jugaba con Andriu a encontrar el hueso que él le tiraba.

Larry ya se ha ido por bastante tiempo y aunque deseo pararme e ir a buscarlo, no puedo mi cuerpo  me lo impide y creo que no me queda mucho tiempo.

Cuando veo que el día se empieza a oscurecer mas y mas recuerdos de los cuerpos de mis padres y de mi hermana empiezan a aparecer, pero no falta el recuerdo del rostro de Andriu, su mirada, sus lagrimas, las palabras que me dijo; ahora si estoy sola, no tengo a nadie, Larry se fue y no ha vuelto cierro mis ojos y solo pienso en descansar, en despertar en los brazos de mi familia para salir a jugar a la pradera como lo hacíamos antes de su muerte; pero algo interrumpe mi intento por descansar, unas luces que se dirigen hacia el lugar en donde estoy, ellos me pueden ver con sus linternas, pero yo no alcanzo a ver sus rostros con tanta oscuridad alrededor, aunque no quiero pensarlo creo que Andriu ha vuelto para terminar con lo que empezó.