Capítulo 12

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[N/A: Saquen los pañuelos, que lo que viene es dolor puro]


El rubio suspiró, agotado. Estaba en su cama, acostado, habiendo dejado el libro que estaba leyendo a la mitad, cuando bien sabía que habría podido terminarlo en ese mismo día pero no lo hizo porque sus pensamientos eran tantos que no lo dejaban en paz ni un solo minuto. Colocó su sinfonía favorita con sus audífonos, porque si sus padres –o alguien de esa casa– descubrían que estaba oyendo eso lo matarían, y se los ajustó, sintiéndose lleno de los acordes que Tchaikovsky había pintado en los pentagramas. Movía sus dedos al ritmo de la pieza sobre su estómago mientras en su mente rondaba la conversación que había tenido con Harry y Louis hacía rato.

—Se está alejando de ti, Niall —había dicho Louis a través del teléfono. Ambos, él y Harry, estaban en casa de éste y, cuando el rubio había llamado para hablar, decidieron colocar el altavoz para hablar todos.

—Él no haría eso, Lou —dijo Harry—. Lo ama demasiado como para alearse de él.

Niall sólo suspiró. Quería creer que lo que decía el ojiverde era cierto, pero los hechos recientes hacían que sintiera que era Louis quien tenía la razón.

—Di lo que quieras, pero yo lo conozco y sé que el que actúe así no es normal. ¿Desde cuándo no iría a su casa porque se siente "mal"? ¡Por favor, Zayn llevaría todas las pastillas y medicamentos necesarios si se tratara de estar con Niall! A mí no me engaña, eh; a otro perro con ese hueso.

El rubio sintió una punzada en su interior.

Era cierto.

Además, el moreno sabía que en su casa había toda clase de medicinas que pudiera necesitar –y prácticamente cualquier cosa que pudiera necesitar, en realidad, porque la señora holandesa era tan cuidadosa y protectora con su familia que compraba todo lo pensara que alguna vez haría falta en esa casa.

—Quizá sólo está pasando por algo... —comentó el ojiverde— ¡Vamos, no creo que en serio sea capaz de alejarse de Niall! ¡Él es su todo! ¡Es como su fuente de agua; sin él se seca!

Niall sonrió de lado ante la comparación. Era lindo pensar que Zayn lo considerara eso, aunque en realidad la frase no hubiera salido de su boca.

—Dejen de engañarse a ustedes mismos, ¿sí? —gruñó Louis—. Son tan ingenuos, siempre pensando bien de los demás...

—Es irónico que hables de no mentirse a uno mismo, ¿no crees? —contraatacó el rubio—. Te gusta Harry, tú también le gustas, lo tienes en la palma de tu mano, y no haces nada por estar con él. ¿De qué te quejas, Lou, si tú haces lo mismo?

Se escuchó un bufido seguido de un gruñido.

—Los odio tanto —soltó Louis—. Iré a comprar otra botella, ugh, ya regreso.

Se escuchó una puerta ser azotada y luego un suspiro por parte de Harry.

—Lo siento —comentó—. Está un poco borracho y...

—Dicen que los borrachos nunca mienten —lo interrumpió el ojiazul.

—Al igual que dicen que tener una identificación falsa es ilegal y, sin embargo, míralo; usando una para ir a comprar más alcohol que no hará más que volverlo más mierda.

More than just friends  ~Ziall Horlik~ AU #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora