Capitulo 1.5 (PCR)

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Tarde un poco más de lo previsto para ver la reacción de su Excelencia por mi demora, pero tanto en la aristocracia como en este mundo hacer esperar a un hombre a veces es una buena forma de alterar las emociones, inclinar la balanza y tener abiertas las posibilidad. Sin embargo, no podría predecir que podría salir de aquella conversación y como me podía afectar.

- La cuestión es cuanto sabe él, o que querrá en realidad después de todo .... - En mis propios susurros mientras iba al salón azul de esta casa, sabia que había muchos que hasta hoy en día creían que la desaparecida Lady Caytlin era la asesina del gemelo del actual Duque, y que la actual Scarlett, la dama roja era la cortesana mas deseada que solo algunos podrían pagar y otros obtener dependía mucho de lo que yo deseara.

Me detuve frente a la puerta, suspire y deje atrás todo los miedos que pudiese tener y volvió la confianza de quien era ahora, sonreí como la prostituta que soy y como Scarlett no permitiría que nada ni nadie no estuviese a mi merced y aplicaría todo lo que se para ello. 

Entre sin mas y el Duque de Devonshire  estaba tomando una copa de uno de nuestros mejores escoceses que suelo dar a mis clientes, y por la vista de Tony pude ver que ella le sirvió, le agradecí al verla por el servicio y le hice una señal para que se saliera.

- Deja la puerta cerrada, y recuerda lo que te dije, Latonia - Asintió y como un pequeña ráfaga de viento desapareció, a veces me asombrara su rapidez para su robustez y edad, tenia la mirada del Duque de Devonshire sobre mi y aunque su expresión era seria, no pude evitar la similitud con otro rostro de antaño.

- Creo que ahora estamos en condiciones de hablar o no, Signora. - Dijo con su voz un tanto ronca, pero manteniendo aquel tono frió que al parecer era la carta ducal de su legado.

- Así que me llamara Signora, ya que no estoy dentro de la categoría de corresponder a ser llamada Señorita por mi profesión y tampoco nos conocemos para que le deje usar mi nombre, por lo cual su excelencia, le dejo a usted el primer round para que hable y me diga que asuntos tiene conmigo - Me acerque a él mientras sus ojos se posaban en mi pelo largo y mis hombros, como un gato sigiloso bordee su poderosa presencia y ahora estábamos a solos pocos centímetros, siempre era divertido poder ver a los ojos de un hombre tan de cerca y ver como se arremolinaban sus emociones en ellos, incluso el no era la excepción, en un movimiento sorpresa pose mis manos en sus hombres aplique un poco de fuerza ya que mi presencia femenina lo desestabilizo y cayo sentado en una de los sitiales de madera de roble que estaban en este salón, no pude evitar que se escapara una risa de placer por como estaba su mirada ahora.

- Quédese mejor allí su Excelencia, le serviré un poco de nuestros tragos pero prefiero que este sentado para que podamos conversar mejor - Él no dijo nada pero su mirada era una pequeña declaración de guerra a mi persona, pero una que al parecer gane temporalmente por que solo asintió y dejo su vaso en la pequeña mesa contigua de donde estaba .

- He venido aquí para hacer un trato con usted que nos podría convenir a los dos, Signora. - Pude ver un brillo malicioso en sus ojos mientras servia en su vaso un poco de Escoses y mientras me servia Borboun para mi en otro. Entonces acerque su vaso y lo tomo agradeciendo silenciosamente mientras tome mi copa y tomando un sorbo camine en dirección a una ventana cercana para observa que el cielo gris de Londres y la lluvia aun seguían, devolví mi mirada con una cara neutral.

- Que tipo de trato su Excelencia requiero detalles, ver mis ganancias, las consecuencias, el tiempo, todo. - Le sonreí y bebí un poco mas - No creo que su presencia sea solo por que me busca para darle placer cuando se que usted suele tener amantes que mantiene y les deja un pago como una casa o dinero para lo que ellas desean, así como compartir  la cama con las jóvenes o damas maduras de la alta sociedad de Inglaterra o fuera de ella. 

- Que interesante que este tan al tanto de mi vida intima, aun cuando nunca hemos tenido la oportunidad de conocernos mejor Signora Scarlett pero eso puede cambiar si quiere - Sus ojos eran realmente de azul profundo e increíble su mirada era como de una águila en plena cacería majestuoso como salvaje, y era muy consciente de que era peligro pero si aquello no era suficiente el restante lo era mas - Pero este trato que le propongo es otro, quiero que sea mi cortesana pero solo como una fachada no requeriré de sus servicios en mi cama.

-Mmm, me quiere como su cortesana pero no quiere mis servicios me podría aclarar que quiere con su fachada su Excelencia, aparte de presumir de mi hacia sus otros pares aristocráticos .. ohh que tenga problemas con ya sabe usted para no quererme en su cama - Su mirada se transformo en dos segundos de coquetería masculina a sorpresa, y ahora a indignación y por ultimo furia.

- No Singora, no tengo problemas de ese tipo y tampoco tengo problemas en demostrárselo si quiere - Sin darme tiempo de responder dejo su vaso en la mesa y se acerco con grandes paso haciéndome sentir que el aire a mi alrededor se hacia escaso, no me dio tiempo para pensar y tomo entre sus grandes manos mi rostro y lo acerco al suyo, clavando sus labios hambrientos sobre los míos tomando el control de ellos, una y otra vez de forma dura y después suave no se cuanto fue que me dejo con el cuerpo totalmente cálido deseándole, cuando se alejo de mi en dirección al asiento yo estaba tiritando por diversas emociones.

- Grrr - No pude evitar gruñir por lo bajo - Maldito - dije silenciosamente 

- Estamos a mano - Y escuche una risa ronca escapando de él, necesite mucho esfuerzo para mantenerme seria, pero lo logre.

- Sabes que te falta sentido del humor - Deseaba tirarle el vaso de mi trago pero por ahora no era una opción así que lo bebí en seco y eso me ayudo a despertar de cualquier pensamiento en la cabeza.

- No necesitamos de humor ahora su Excelencia, necesito saber que necesita de mi ademas de la fachada claro esta - Estaba un poco irritada por no decir excitada y esa no era una combinación muy agradable.

Me miro seriamente - Mis fuentes dicen que bajo su tutela tiene escondida en alguna parte de Inglaterra a Lady Caytlin Harthwell y requiero de su ayuda para descubrir la verdad tras la muerte de mi hermano. 

Aquello, era algo que no esperaba y la mención de mi nombre debió dejar en claro mi sorpresa, la copa se resbalo al suelo y callo en pedazos mientras solo pude observar y perderme en mis pensamientos.  


Dama de SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora