Después del recuerdo [Crónicas de Abril #4]

Vencedor

(Tania, dimensión de humanos)

Aprire apareció en la habitación, abrazada a su protegida, con la cachorra temblando un poco entre los brazos de Tania, un reconfortante silencio que rodeaba la casa, una simple respiración era lo único que se escuchaba.

-Ya, tranquila- susurró Aprire en el oído de Tania –Estás bien

Aprire hizo ademán de alejarse, pero Tania se aferró aún más a ella, no quería sentirse sola, necesitaba un pequeño tiempo abrazada a alguien.

Aprire rio un poco.

-Qué mala fe me tienes- dijo el ángel –Confía más en mí, eres mi recipiente, mi envoltura, te protegeré en todo momento

Tania la miró un momento, sus ojos llorosos, su labio temblaba, sus manos aún aferradas a la ropa de Aprire, entre sus brazos aún tenía a Trina.

Tania sabía que Aprire la protegía, pero no sabía por cuánto tiempo más.

-Bueno, al menos mientras seas mi recipiente- aclaró Aprire.

-¿Qué pasará si algún día me dejas?

-Si eso llega a pasar, tendrías una vida normal, como la de cualquier otro mortal, pero si te llego a necesitar nuevamente, tendrás que obedecer sin preguntar. Así será tu vida hasta que mueras

-¿Y qué sucederá en ese momento?

-Tu alma podrá viajar a mi mundo, mi propia dimensión. Ahí todos son mis esclavos, almas que he devorado y recolectado a lo largo de los años. Todos ellos esclavos. No te asustes, soy un ama bondadosa, después de todo soy un ángel

-Un ángel malvado

-Pero un ángel, al fin y al cabo

-¿Y qué sucede en ese lugar?

-Nada. Todos ustedes tienen una vida normal, si necesito algo les llamo y obedecen sin preguntar, solo eso

-Como en vida...

-Así es

-¿Y si nos negamos?

-No lo hacen. A excepción de mis ayudantes angelicales, todos mis ayudantes tiene una pequeña idea de lo que busco, por eso me ayudan

-¿Y qué buscas?

-No lo puedes saber hasta que mueras, en estos momentos tu mente está abierta a cualquier ángel legendario que quiera conocer tus secretos

-¿Pero por qué? ¿Por qué continuar? ¡Veo el sufrimiento en tus ojos! ¿Por qué no abandonar esta idea?

-¡Lo he abandonado todo por esto! Yo era un ángel legendario, y aunque sentía envidia de mis compañeros, me gustaba ver la felicidad de aquellos a los que ayudaba, jamás sabían que se trataba de mí, pero me encantaba ver sus sonrisas cuando obtenían lo que querían... pero lo abandoné, y todo por conocer... eso

-Más bien, lo perdiste todo

-Vale la pena

-¿Segura?

-¡Deja ya de cuestionar! Si no tienes ni idea de lo que ha ocurrido

-¡Pues explícame!

Se escuchó el sonido de un cristal rompiéndose, luego silencio. Aprire estaba furiosa y Tania lo sabía.

-Lo siento- dijo la humana. Ambas se abrazaron.

-Shh, no es tu culpa- susurró Aprire –Aún no lo entiendes