Esa fue la primera muerte de alguien que conocía y amaba, Lilián me consoló lo cual agradecí eternamente, Andrés también estuvo allí pero debía irse ya que al siguiente día se iría a Francia de vacaciones. Mi orgullo era tan grande...que no permitiría que me vieran llorar las personas que me han hecho sufrir anteriormente y sientan lastima de mí.
Fue difícil superar aquella parte de mi vida, por lo que me refugié en lo más fácil, el alcohol, todas las noches pasaba en mi cuarto junto a botella de cerveza y cantando tristes melodías. Durante las mañanas desaparecía toda evidencia de la anterior noche y me quedaba leyendo a lado de mi ventana, veía al mundo seguir...jóvenes saliendo del colegio, familias junto a sus hijos riendo y parejas demostrándose su afecto. Mientras tanto mi vida se había detenido dejándome allí sufriendo, por otro lado el mundo seguía normalmente sin importarle que yo pretendía quitarme la vida.
Sí, lo intente, puede que se note lo cobarde que era como para querer suicidarme, pero lo era más al no ingerir el arsénico. Vi a mi abuela parada en la ventana, con aquella mirada de desaprobación que siempre me daba al desobedecer su orden, recuerdo que las pastillas cayeron de mis manos y me que estática viéndola solo sé que después me desperté en una camilla de hospital con mi madre viéndome preocupada.
Tome terapia psicológica el resto del verano, mi familia se preocupó mucho pero no lo demostraban cuando me reprochaban lo que había intentado hacer, Lilián me escribía seguido preguntándome mi estado, ella intento visitarme durante mi estadía en el hospital pero mi mamá le prohibió acercarse a mí. Cuando estuve nuevamente sana salí en busca de trabajo, pues no iba a vivir por siempre en una casa donde lo único que recibía era insultos y criticas; decidí ir a la pizzería en donde meses antes encontré un lugar desocupado de repartidor, supuse que ya habrían contratado a alguien pero por lo que me contaron lo despidieron por robar el dinero de caja. El dueño del local dijo que me pondría a prueba durante dos semanas y luego me contrataría si le gustaba mi trabajo, pero que de todas formas me podría quedar con la propina de los clientes.
Me contacté con Lili ya que recordaba haberla escuchado decirme que consiguió un departamento para las dos, la fui a visitar y preguntarle si podría vivir allí como años atrás lo planeamos, ella no dudo ni por un segundo en decirme que me tocaría preparar la cena esa noche, por lo que al salir me fui a recoger mis cosas para llevarlas al departamento, mis padres se asombraron al ver que encontré tan rápido un lugar para vivir, les conté que la zona donde estaba ubicada era central y había todo lo necesario alrededor incluso alguna que otra discoteca, cuando me despedí de ellos mi madre me miro dudosa como si supiera que tramaba algo, ella poseía un don que le permitía saber cómo era una persona solo con verla, acertaba mucho cuando decía que alguien no era de fiar aunque se vea como la mejor persona del mundo. Regrese al departamento que estaba más arreglado, era en el séptimo piso y la sala era amplia con muebles de color crema y un plasma en la pared derecha, abajo de el mismo había un dvd, a la izquierda se encontraba la cocina que tenía la alacena de madera, no era muy amplia pero si lo suficientemente espaciosa como para tener un mesón en el medio, la lavandería estaba detrás de esta y...NO HABIA LAVADORA, yo no sabía lavar ropa más que en la lavadora, bueno luego veré como comprar una, los cuartos se encontraban del lado derecho uno a cada lado del plasma con baño privado, al fondo de la sala estaba el comedor con una mesa de vidrio para cinco personas y al lado de la misma una balcón con sillas y una mesa para tomar el té. Me encantaba el departamento era acogedor y de un tamaño justo para las dos.
Lili me enseño el cuarto donde iba a quedarme, era el que estaba cerca de la entrada cuando lo vi me gusto como era, tenía una ventana por donde podía asomarme y un librero lleno de libros de Lili, a lado izquierdo de la puerta estaba el armario, y a lado derecho el baño, el único problema era que no había una cama por lo que tendría que dormir en el sofá mientras tanto. No me importaba tener que dormir incómoda durante un tiempo porque estaba feliz, viviría con mi mejor amiga sin que nadie me moleste y controle, podía hacer lo que yo quería, por fin era libre y posiblemente tendría trabajo, esa noche casi no dormí esperando el amanecer con nerviosismo porque desde ese momento me haría cargo de mi vida y la viviría como yo quisiera.
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Humans
General FictionNo es una historia de superación, ni una de reflexión y tampoco propongo que de pena... Solo es una persona que decidió contar su historia y darse cuenta lo que realmente significa ser lo que es. Humana.