Todos mis sentimientos.

Tu nombre

Lucía. Tu nombre estalla en mi cabeza en forma de miles de recuerdos, hermosos todos, que al juntarlos forman mi mayor tesoro: nuestra historia.

Tu sola presencia otorga sentido a toda mi existencia.
Eliminas mis dudas, mis temores,
haces que olvide, de la vida, sus horrores.

No puedo narrar cuanto te quiero,
porque es algo incalculable,
igual que tampoco puedo explicar cuanto te anhelo,
pues es un dolor inestimable.

Pero el dolor de este anhelo es lo que demuestra que sigo vivo, que existo, que tengo alma, pues ¿como iba a sentir tal angustia si no la tuviera?

Pero hay algo de lo que no quiero que dudes, y es que mi corazón te pertenece. Te pertenece desde el primer día que me sonreíste, que me hablaste, que sin proponertelo, me enamoraste.

Y tampoco olvides que, pase lo que pase, voy a estar a tu lado,
Apoyándote cuando lo necesites, en lo bueno, y en lo malo.

Pues lo que te digo no es ningún farol,
ni un engaño,
pues estas palabras me salen del corazón,
y te las entrego como oro en paño.